"Más control policial en el aeropuerto y una ciudad en alerta"

Estudio en Lyón, la tercera ciudad de Francia y sede de Interpol. Traslos atentados del 13 de noviembre deParís, he vivido situaciones que hacen palpable la situación de alerta.

Los controles en las fronteras se han intensificado. El martes, al tomar el vuelo de vuelta a Barcelona, encontré una situación diferente en el aeropuerto de Lyón. Por primera vez, después de todos los años que llevo en la ciudad francesa, me topé con una garita de la policía donde te pedían el DNI o pasaporte y la tarjeta de embarque. Un nuevo control añadido al rutinario control de seguridad de maletas y arco de detección.

También la vida en la ciudad ha cambiado. La semana pasada el alcalde de Lyón anunció que se anulaba La Fête des Lumières. Un evento que el año pasado llegó a reunir a más de 3 millones de visitantes. Entre los días 5 y 8 de diciembre estaban previstas, como cada año, una serie de actividades y exposiciones que se han convertido en un símbolo de la ciudad.

EVITAR LAS "ESCENAS DE PÁNICO"

Entre ellas destacan las proyecciones musicales que se realizan sobre los muros de los edificios más emblemáticos de Lyón nada más caer la noche, haciendo las delicias de los espectadores. El sindicato de policías ha sido claro al expresar la dificultad de garantizar la seguridad de los lugares y de momentos en los que se pueden producir "escenas de pánico" causadas por ejemplo por un petardo. Según palabras del alcalde y asumiendo el impacto económico que supone para la ciudad esta decisión, La Fête des Lumières queda anulada y en su lugar se realizará un homenaje a las víctimas de París el día 8.

Me sorprende y entristece enormemente hechos como el delhombre con turbante y aspecto musulmán del metro. Una situación que no la he vivido hasta la fecha en Francia y que no se debería producir.