PREOCUPACIÓN EN EUROPA
La UE vigilará con lupa al Gobierno ultraconservador de Polonia
La Comisión Europea analizará si se cumplen las exigencias de un Estado de derecho tras la reforma del Tribunal Constitucional y la ley de medios. Las primeras medidas adoptadas por el Ejecutivo de la primera ministra Beata Szydlo han casuado gran inquietud entre los socios
Polonia está en el punto de mira de la Unión Europea. El tufo totalitarista del Gobierno polaco, tras la polémica ley sobre losmedios de comunicación públicos y la reforma del Tribunal Constitucional, será objeto de debate en una reunión que mantendrá el próximo 13 de enero la Comisión Europea.
Este debate se enmarca en un mecanismo creado en el 2014 para garantizar que todos países cumplen las exigencias propias de un Estado de derecho. Tras la primera valoración, la Comisión Europea (CE) tiene la potestad de emitir una opinión formal sobre el asunto y, si llegara el caso, abrir un expediente disciplinario por vulneración de los principios fundamentales europeos, una posibilidad de la que no hay precedentes. Un portavoz del Ejecutivo comunitario ha informado de que la CE y Polonia ya mantienen un "diálogo intensivo" sobre estas cuestiones.
El pasado 25 de octubre, las elecciones en Polonia auparon al poder alultraconservador y nacionalista partido Ley y Justicia, liderado por el exprimerministro Jaroslaw Kaczynski. Una de las primeras decisiones del nuevo Gobierno de la primera ministraBeata Szydlo ha levantado ampollas en la oposición interna sino también en las autoridades europeas. La formación ya controla las dos Cámaras y el presidente de Polonia, Andrzej Duda, está también vinculado al partido Ley y Justicia.
La nueva ley de medios obligará a los entes públicos a seguir la línea oficial marcada por el Gobierno y la reforma del Tribunal Constitucional implicará, según la oposición, mantener bajo control al estamento judicial vulnerando la máxima de la independencia.
Los cambios en el Tribunal Constitucional modifican el régimen de mayorías para determinar la constitucionalidad de las leyes -de mayoría simple pasará a ser de dos tercios- y permite que tanto el presidente como el ministro de Justicia puedan iniciar procedimientos disciplinarios contra jueces. La reforma en la ley de medios ya ha provocado numerosas dimisiones.
INDEPENDENCIA JUDICIAL EN ENTREDICHO
El pasado 23 de diciembre, la Comisión Europea mandó una carta al Gobierno polaco instándole a presentar un informe completo sobre las consecuencias del impacto de la reforma del constitucional en su "independencia y funcionamiento" antes de que entrara en vigor. Pero, haciendo caso omiso a la petición, el presidente del país, Andrzej Duda, ratificó la controvertida reforma con su firma días después.
En la misiva enviada a los ministros polacos de Asuntos Exteriores y Justicia, el vicepresidente primero de la CE, Frans Timmermans, apelaba al "respeto al Estado de derecho" como uno de los valores comunes de la Unión Europea.
La Plataforma Ciudadana, el partido de la oposición del exprimer ministro y presidente de Consejo Europeo Donald Tusk, no tiene la menor duda de que la nueva reforma de la judicatura es una herramiento para conseguir objetivos más ambiciosos como sería la reforma de la Constitución.
El comisario europeo de Economía, el alemán Günther Oettinger, ha advertido también de que las instituciones europeas actuarán "en consecuencia" ante las reformas adoptadas por Polonia para limitar la independencia del Tribunal Constitucional o para controlar los medios públicos.