La presidencia siria confirma la retirada rusa tras la conversación entre Asad y Putin
La Presidencia siria confirmó hoy que "la reducción" de las fuerzas rusas en el país árabe fue acordada tras una conversación telefónica entre el mandatario sirio, Bachar al Asad, y el ruso, Vladímir Putin.
En un comunicado, la oficina del jefe de Estado sirio explicó que ambas partes resolvieron "disminuir el número de las fuerzas aéreas rusas en Siria, en concordancia con la situación actual sobre el terreno".
La nota destacó que esta decisión se ha tomado "después de los éxitos logrados sobre el terreno por el ejército sirio, en cooperación con la aviación rusa, en la lucha contra el terrorismo, el retorno de la seguridad a varias zonas y el aumento de las reconciliaciones en el país".
Putin anunció hoy la retirada de "la mayor parte" de las fuerzas rusas que llevaban a cabo bombardeos en Siria desde el pasado 30 de septiembre por considerar que han cumplido su misión.
"Creo que la tarea que nuestras fuerzas armadas y el Ministerio de Defensa tenían por delante se ha cumplido totalmente, por eso ordeno al ministro de Defensa que desde mañana comience la retirada de la mayor parte de nuestras fuerzas en Siria", reveló Putin, en una reunión con responsables de Defensa y Exteriores difundida por medios rusos.
La intervención militar de Rusia, aliada del régimen de Damasco, en el conflicto ha permitido el avance del ejército sirio en los últimos meses en distintas partes del país.
La decisión de hoy se produce en medio de la reanudación este lunes de las negociaciones de paz indirectas entre el Gobierno sirio y la principal alianza opositora, la Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN), en Ginebra, auspiciadas por la ONU.
El repliegue mañana de los efectivos rusos coincidirá con el quinto aniversario del conflicto en el país árabe, donde más de 270.000 personas han fallecido por la violencia, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Las hostilidades se han reducido en las últimas semanas por un alto el fuego, que todavía sigue vigente, acordado por Washington y Moscú, y que han aceptado tanto las autoridades sirias como la CSN.