«Un muchacho muy agradable»
Moutaux, que carece de antecedentes penales, está domiciliado en Nant-le-Petit, un pueblo de 80 habitantes del departamento de Meuse (este de Francia). Su alcalde lo describe como «un muchacho muy agradable con sus vecinos, inteligente y simpático». Según el director de la cooperativa agrícola en la que trabaja desde hace un año en la inseminación de vacas es un «empleado irreprochable». Un ganadero para el que trabajó lo define como «un loco de las vacas». Esa misma persona señala que Moutaux viajó a Ucrania las pasadas Navidades para visitar a una «amiga íntima». Francia extrema las medidas de seguridad ante la Eurocopa mientras las fuerzas de seguridad de otros países europeos siguen en alerta.