EE UU y Rusia aumentan la tensión en la ONU por Siria
El secretario general de la institución, António Guterres, lamenta que «la Guerra Fría ha vuelto».
mario villar | naciones unidas
La tensión entre EE UU y Rusia en torno a Siria siguió aumentando ayer en la ONU, donde las dos potencias intercambiaron acusaciones a la espera de que Washington decida si responde militarmente al supuesto uso de armas químicas.
«La Guerra Fría ha vuelto», lamentó el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, durante una nueva reunión del Consejo de Seguridad en la que, lejos de acercar posturas, las dos partes insistieron una vez más en sus tesis.
Rusia, que convocó la sesión ante las «amenazas» de EE UU a Siria, volvió a defender que el supuesto ataque químico del pasado sábado en Duma fue un montaje y que Washington y sus aliados quieren usarlo como pretexto para actuar contra las autoridades de Damasco.
«Parece que Washington ha adoptado una política categórica para desencadenar una situación militar contra Siria. Esto no puede tolerarse», dijo el embajador ruso, Vasili Nebenzia.
Nebenzia dijo que EE UU, con sus amenazas, está mostrando un comportamiento «no digno» de un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.
«Rusia puede quejarse todo lo que quiera sobre noticias falsas, pero nadie se cree sus mentiras y sus cortinas de humo», le respondió la representante estadounidense, Nikki Haley.
La embajadora aseguró que su país tiene «prueba» de que el ataque existió y defendió que Rusia es también responsable de él, por no parar los pies al Gobierno de Bachar al Asad, al que Occidente culpa de lo ocurrido en Duma, donde murieron cerca de medio centenar de personas supuestamente por una sustancia tóxica.
Haley dijo que Moscú «no se ha detenido ante nada para defender los múltiples usos de armas químicas del régimen sirio», utilizando repetidamente su poder de veto para evitar medidas del Consejo de Seguridad. «Se suponía que Rusia debía garantizar que Al Asad no usaba armas químicas y Rusia ha hecho lo contrario», recalcó.
Según apuntó, EE UU calcula que el régimen ha utilizado armas químicas al menos cincuenta veces, por lo que el episodio de Duma no es algo aislado.
Haley confirmó que por ahora el presidente estadounidense, Donald Trump, no ha tomado una decisión sobre un posible ataque contra Siria a modo de represalia, pero insistió en que tiene que haber algún tipo de respuesta.
La embajadora, que el jueves estuvo en las reuniones mantenidas en la Casa Blanca para discutir qué hacer ante al supuesto ataque químico, dijo que en Washington continuarán las consultas.