Israel responde con bombardeos a los ataques con cohetes de Hamás

Milicias palestinas en Gaza ha mantenido disparos de cohetes contra Israel durante la noche del sábado, A lo que Israel ha respondido con dos tandas de bombardeos sobre al menos 15 infraestructuras militares del movimiento islamista Hamás, al que responsabiliza de las agresiones. Aviones de combate del Ejército "atacaron 10 sitios terroristas en tres complejos militares pertenecientes a la organización terrorista Hamás", incluidos dos lugares de fabricación de munición y almacenamiento, destacó la portavocía castrense en Twitter.

Fuentes de seguridad palestinas situaron las instalaciones militares en las ciudades de Rafah y Jan Junis, en el sur del enclave, y al este. No informaron de heridos. Los bombardeos de represalia respondían al previo disparo de al menos tres cohetes, de los que dos fueron interceptados por el sistema israelí de defensa antimisiles Cúpula de Hierro y el otro que habría alcanzado el enclave palestino bajo bloqueo. Los lanzamientos activaron las alarmas antiaéreas en los consejos regionales de Eshkol, Shaar HaNeguev y la ciudad de Sderot, al sur de Israel.

El Ejército también acusó a Hamás, que controla de facto la Franja desde 2007, "de orquestar varias actividades terroristas durante el fin de semana", incluidas "colocar granadas, lanzar artefactos explosivos, intentos de cruzar la valla de seguridad y dañar la infraestructura, y crear incendios en territorio israelí con cometas incendiarias y globos".

Cometas incendiarias

Durante las protestas de la Gran Marcha del Retorno, que empezaron en la Franja el 30 de marzo, los palestinos han comenzado a usar estas cometas que vuelan con artefactos incendiarios adosados para causar fuego en territorio israelí, y que este fin de semana provocaron un grave incendio en una reserva natural.

Este intercambio de enfrentamientos rompe la frágil calma que se había establecido desde el miércoles, cuando las milicias de Hamás y Yihad islámica detuvieron el lanzamiento desde el enclave de más de cien cohetes y morteros hacia Israel en menos de 24 horas. El Ejército israelí había respondido con bombardeos de represalia sobre más de 60 infraestructuras militares de los movimientos islamistas y aseguró haber asestado "un golpe significativo" a las capacidades militares de Hamás.

Israel ha insistido en que no está interesado en una escalada y considera que la situación depende de Hamás, al que responsabilizan de las agresiones procedentes del enclave. "Si va a escalar la situación y continúan disparando contra civiles israelíes el Ejército está listo y preparado", advirtió esta semana el portavoz militar teniente coronel Jonathan Conricus.