PROBLEMAS DE CONVIVENCIA
Un nuevo brote de violencia xenófoba contra inmigrantes africanos se cobra 2 muertos en Sudáfrica
El doble homicidio se produjo cuando los comerciantes trataban de evitar el saqueo de sus tiendas
Barrio de chabolas en la periferia de Johannesburgo. /
Al menos dos personas murieron por armas de fuego este miércoles en el mayor barrio negro de Sudáfrica, Soweto (Johannesburgo), en un nuevo brote de violencia xenófoba contra inmigrantes de otros países africanos y asiáticos. Según las primeras informaciones, los fallecidos han sido alcanzados por disparos efectuados por tenderos que trataban de proteger sus negocios y evitar que fueran saqueados, en el distrito de White City. Cinco extranjeros han sido detenidos en relación a los hechos.
El hermano de una de las víctimas, el sudafricano de 23 años Banele Qhayiso, ha explicado a medios locales que el joven murió tiroteado cuando compraba pan en una de las tiendas afectadas por los actos de pillaje. El familiar de la víctima se ha mostrado indignado con los pillajes y los mensajes xenófobos que lanzaban algunos de sus compatriotas presentes en el lugar de los hechos. “He perdido a mi hermano por culpa de un acto sin sentido de la comunidad”, ha declarado al diario 'Times' de Johannesburgo.
Venta de producto caducado
La chispa que ha vuelto a prender la recurrente hoguera de la violencia xenófoba en las zonas deprimidas en que vive la mayoría de la población negra sudafricana parece haber sido el rumor de que un comercio regentado por extranjeros estaba vendiendo productos caducados. Como suele ocurrir en este tipo de episodios, quienes perpetran los saqueos acusan a los inmigrantes de robar el trabajo de los locales, multiplicar la criminalidad del país y reventar el mercado con precios y sueldos más bajos.
Inmigrantes de países como Somalia, Etiopía, Nigeria, Zimbabue, Pakistán o Sri Lanka son dueños de buena parte de los colmados y otros pequeños comercios en los 'townships' sudafricanos, construidos por el régimen del 'apartheid' para albergar a la mano de obra negra que tenía prohibido vivir en las ciudades, reservadas entonces a los blancos.