Incierto panorama en Suecia por la subida de la ultraderecha
El empate entre los bloques de izquierda y la alianza de centroderecha es el otro escollo.
anxo lamela | estocolmo
Suecia afronta un incierto panorama político tras las elecciones generales del pasado domingo, en las que el bloque gubernamental de izquierda y la opositora Alianza de centroderecha obtuvieron casi el mismo resultado y el ultraderechista Demócratas de Suecia (SD) subió varios puntos y reforzó su papel de árbitro. Los grupos políticos suecos dieron ayer los primeros pasos para desbloquear la situación, tras los comicios generales de ayer en los que la izquierda logró un triunfo ajustado frente a la opositora Alianza de centroderecha y el xenófobo Demócratas de Suecia (SD) consiguió un rol que puede ser decisivo.
El recuento provisional otorgó al bloque gobernante del primer ministro, el socialdemócrata Stefan Löfven, el 40,6 % de los votos frente al 40,3 % de la Alianza y un escaño más (144 por 143), mientras el SD consolidó su posición como tercer partido con el 17,6 por ciento y 62 asientos. El equilibrio de fuerzas entre los dos principales bloques podría verse alterado cuando dentro de dos días la Autoridad Electoral haya contabilizado las papeletas procedentes del exterior y los votos anticipados enviados por correo en plazo y que no llegaron a los distritos electorales ayer.
En los anteriores comicios de 2014 fueron algo más de 190.000, de los que unos 50.000 correspondieron al voto exterior, en el que los partidos de centroderecha suelen recibir más apoyo que la izquierda, un factor importante dada la igualdad en los comicios. Menos de 29.000 votos separan a la izquierda de la Alianza y el voto exterior ya ha sido determinante en otras elecciones: en 1979 propició que el centroderecha remontara el resultado.
El líder del grupo parlamentario socialdemócrata, Anders Ygeman, y el ministro sueco de Interior, Morgan Johansson, llamaron a los partidos «decentes» —todos menos el SD— a romper la «dañina» política de bloques, independientemente de cuál obtiene más votos al final.
Pero resaltaron, tras una reunión de su comisión ejecutiva, que en ambos casos debe ser Löfven quien lidere un nuevo Ejecutivo, ya que su partido fue el más votado, con el 28,4 % de los sufragios, el peor resultado de la fuerza que ha ganado todas las elecciones el último siglo.
«Pasará un tiempo antes de que haya Gobierno, pueden ser semanas, pero también meses», alertó Ygeman, quien pidió esperar al recuento definitivo del miércoles para dar más pistas sobre próximos pasos.
El secretario de organización del Partido Moderado (conservador), Gunnar Strömmer, dijo antes de una reunión de las cúpulas de las formaciones de la Alianza -también integrada por liberales, centristas y democristianos- que los suecos han votado por un cambio de Gobierno y que esta coalición no va a conversar de momento con otras fuerzas.