El rescate tras el paso del huracán ‘Michael’ se centra en Florida
Se contabilizan 17 muertos y las labores de ayuda son difíciles por el mal estado de las carreteras.
efe | miami (ee uu)
Las tareas de rescate en el sureste de EE UU tras la devastación causada esta semana por Michael se centraron ayer en Mexico Beach y Panama City, ciudades floridanas que parecen bombardeadas y que pueden aumentar la cifra de 17 muertos que hasta ahora se ha cobrado el potente ciclón en el país.
El gobernador de Florida, Rick Scott, sobrevoló ayer con la Guardia Nacional los condados Franklin, Holmes, Washington y Gadsden, en el llamado ‘Panhandle’ (el mango de la sartén), en el noroeste del estado, a donde Michael llegó el miércoles pasado como un huracán de casi categoría 5, la mayor en la escala Saffir-Simpson.
La remoción de escombros y la ubicación de posibles víctimas se ha ralentizado debido al bloqueo y destrucción de carreteras y caminos de acceso para los socorristas y equipos de emergencia y también por los cortes en telefonía celular que impiden a las familias y autoridades rastrear a los damnificados. El panorama de destrucción de viviendas, escuelas, negocios, marinas, árboles y vías es especialmente desolador en México Beach, en donde los servicios de agua, alcantarillado y comunicaciones quedaron estropeados y se prevé que tardarán meses en volver a la normalidad.
«No quedó un solo negocio», se lamentó ayer Al Cathey, alcalde de México Beach, un paraíso costero donde Michael tocó tierra con toda la furia de sus vientos de 250 kilómetros hora (155 m/h).
El mismo alcalde Cathey estuvo incomunicado y se tuvo que valer de teléfonos satélite de la prensa que ha llegado a la zona.
Casa por casa, muchas de ellas reducidas a escombros, bote por bote, las autoridades realizan el censo en compañía de perros adiestrados para el hallazgo de personas en esta ciudad de poco más de mil habitantes.
Unos 30 kilómetros al oeste (20 millas) de Mexico City, un enorme gimnasio escolar en Panama City parece el emblema de la destrucción de esta ciudad costera a la que ayer comenzaron a regresar sus residentes para deambular por calles destrozadas salvando pocos enseres entre las ruinas.
La evaluación de daños y la búsqueda de víctimas avanza en el sureste del país en medio de apagones en Florida, Georgia, Carolina del Norte y Virginia, donde al menos 750.000 familias y negocios permanecían ayer sin electricidad, según la web especializada Poweroutage.us.
Hasta el momento, Florida ha registrado el mayor número de muertes, con ocho, seguido de Virginia, cinco, Carolina del Norte, tres y Georgia, una, informó el Canal CNN. Las autoridades hasta el momento no han identificado a ninguna de las víctimas. Se prevé que esta cifra aumente.