EE UU frustra el intento de Rusia de hacerse con el mando de la Interpol

rafael mañueco | moscú

Los esfuerzos de EE UU para limitar la influencia internacional de Rusia han frustrado los intentos de Moscú de colocar a su candidato al frente de Interpol. El general Alexánder Prokopchuk, que partía como favorito según la prensa británica, fue derrotado ayer en Dubái en la votación celebrada en la 87 Asamblea General de la organización. El vencedor y nuevo presidente de Interpol para un mandato de dos años es el surcoreano Kim Jong Yang, que ha venido desempeñando el cargo de forma interina durante mes y medio. Desde que en días anteriores los cálculos indicaran que Prokopchuk era el que más posibilidades tenía de ser el nuevo líder de la Policía internacional, Washington movilizó su diplomacia para impedirlo. El resultado ha sido otro revolcón de Rusia en la arena global. El gran país eslavo ya fue expulsado del G-8 tras la anexión de Crimea y la crisis en el este de Ucrania, perdió el derecho a voto en la OSCE y las sanciones limitan la expansión mundial de sus empresas y el acceso a tecnologías esenciales. Eso sin contar la marginación sufrida en el deporte por los escándalos de dopaje. Ahora ha fracasado también en la Interpol y pierde votaciones en la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ).

Y se veía venir. Los senadores norteamericanos Chris Coons, Marco Rubio, Jeanne Shaheen y Roger Wicker, integrantes de la de la Comisión de Seguridad y Cooperación con Europa del Congreso de EE UU hicieron pública el lunes una declaración advirtiendo de que la designación de Prokopchuk «sería como poner a un zorro para cuidar del gallinero». Los legisladores sostienen además que «Rusia abusa de Interpol de forma habitual para perseguir a oponentes políticos» y aseguran que el general ruso «ha estado involucrado personalmente».

Moscú lo niega y afirma que Prokopchuk, de 56 años y exmiembro de la cúpula del Ministerio del Interior ruso, es un «profesional con gran experiencia». El mismo departamento señalaba el martes que su elección sería beneficiosa para la comunidad policial internacional y lamentaba la labor de zapa de Washington como una «politización inadmisible», al tiempo que denunciaba la «injerencia» de EE UU en los asuntos de Interpol. «Elegir a un líder íntegro» Ese mismo día, el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, dejó claro que su país apoyaba al candidato surcoreano. «Animamos a todas las naciones y organizaciones que forman parte de la Interpol que respetan el derecho a elegir a un líder íntegro», dijo en alusión a Kim Jong Yang, quien ejercía como presidente en funciones desde octubre tras relevar al chino Meng Hongwei.