EMERGENCIA SANITARIA
República Democrática del Congo ya suma más de 600 muertes por ébola
El Ministerio de Sanidad declara que es el brote del virus más letal de la historia del país y el segundo del mundo
La epidemia de ébola que padece el noreste de la República Democrática del Congo (RDC) ha alcanzado las 606 víctimas mortales, mientras que los contagios han llegado a los 968, según los últimos datos divulgados por el Ministerio de Sanidad del país.
Las cifras ofrecidas por las autoridades congoleñas en el informe, vigentes hasta el 18 de marzo, cifran que entre los 606 fallecidos, 541 dieron positivo en laboratorio. Mientras que el número de contagiados no deja de crecer y hay 903 casos confirmados en laboratorio.
El brote de ébola declarado el 1 agosto del 2018 en las provincias de Kivu del Norte e Ituri, es el más letal de la historia de RDC y el segundo del mundo debido al número de muertes y casos, por detrás de la violenta epidemia que sufrió África Occidental de 2014.
ZONA DE DIFÍCIL ACCESO
No obstante, el acceso del personal sanitario al control de la epidemia se ha resentido por el rechazo de algunas comunidades a recibir tratamiento y la inseguridad en la zona, donde operan numerosos grupos armados.
Un reporte del Ministerio de Sanidad del país africano ha datado que desde el 8 de agosto, cuando empezaron las vacunaciones, más de 89.656 personas han sido inoculadas, en su mayoría en las ciudades de Mabalako, Beni, Mandima, Katwa y Butembo.
El virus del ébola se transmite a través del contacto directo con la sangre y los fluidos corporales contaminados, provoca fiebre hemorrágica y puede llegar a alcanzar una tasa de mortalidad del 90% si no es tratado a tiempo.
LA SEGUNDA EPIDEMIA MÁS LETAL
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró a finales de febrero que "la situación no tiene precedentes, nunca ha habido un brote de ébola en estas condiciones, con una población tan móvil y tantas deficiencias en el sistema de salud".
El brote más devastador a nivel global fue declarado en marzo del 2014, con casos que se remontan a diciembre del 2013 en Guinea-Conakri, país del que se expandió a Sierra Leona y Liberia.
Casi dos años después, en enero del 2016, la OMS declaró el fin de esta epidemia, en la que murieron 11.300 personas y más de 28.500 fueron contagiadas, cifras que podrían ser conservadoras, según esta agencia de la ONU.