derechos humanos
Guaidó llama a sus seguidores a salir a las calles con la visita de Bachelet
Maduro también trata de capitalizar la visita de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, aterrizó en Caracas y de inmediato comenzó la disputa entre el Gobierno y el antimadurismo por captar su atención política. "Le doy la bienvenida. Tenemos muy grandes expectativas y esperamos que sea para mejorar el sistema de Derechos Humanos de Venezuela", dijo Nicolás Maduro, quien recibirá en el Palacio de Miraflores a la ex mandataria chilena. Bachelet también tiene previsto reunirse el viernes con Juan Guaidó, a quien Estados Unidos y otros 54 Gobiernos han reconocido como “presidente encargado”. Pero el diputado quiere mostrarle además que está al frente de un profundo descontento social y por eso llamó a realizar manifestaciones el próximo viernes. "Le pido al pueblo ir a las calles, visibilizar los males, buscar y exigir soluciones. Nuestro llamado es visibilizar la crisis y exigir nuestros derechos", pidió a los caraqueños.
Bachelet fue escueta pero elocuente al llegar. Dijo que vino a "escuchar todas las voces y trabajar con todos los actores para promover y proteger todos los derechos humanos de todos los venezolanos".La dirigente de origen socialistas conversará con el cuerpo diplomático, legisladores y líderes sociales. En las vísperas, parte de su delegación se ha encontrado con el presidente de Copei (socialcristianos), Roberto Enríquez, y el diputado Freddy Guevara, quienes se encuentran asilados en la residencia del embajador de Chile en Caracas. Bachelet sabe lo que le aguarda en Venezuela. De hecho, la misión técnica que la ha precedido en marzo visitó hospitales, cárceles y centros educativos, organizaciones de la sociedad civil y referentes religiosos. Además mantuvo contactos con integrantes del Gobierno y de la Asamblea Nacional, así como víctimas de la persecución política del Estado.
José Miguel Vivanco, director para Américas de Human Right Watch, le pidió a Bachelet que se acerque al hospital JM de los Ríos donde murieron los niños que esperaron sin suerte un trasplante medular. "Lo que no puede hacer son paseos con escenografía o limitarse a reuniones protocolares a puertas cerradas que pudo haber tenido en su oficina en Ginebra, ella debe darle sentido a su presencia en Venezuela", insistió Vivanco.El sector de salud es uno de los que exhibe de manera más descarnada la crisis histórica. Ante la falta de fondos, el Gobierno italiano suspendió a fines de 2018 un convenio suscrito con Venezuela por el cual se hacía cargo de los trasplantes de médula que no podían realizarse en Venezuela. El Gobierno insiste que la falta de pagos se debe al "bloqueo criminal" que lleva adelante la administración de Donald Trump.
LAS NEGOCIACIONES DE OSLO
La presencia de Bachelet coincide con la llegada del segundo envío de ayuda humanitaria de la Cruz Roja y después de que la Unión Europea decidera respaldar las silenciosas negociaciones en Oslo entre el Palacio de Miraflores y la oposición para alcanzar una salida consensuada de la peor crisis de la historia de Venezuela. "Vamos a una solución real al conflicto, y espero que sea así y estoy seguro de que va a ser", dijo Guaidó sobre el papel que puede jugar la Alta Comisionada. La enviada de la ONU ya se había pronunciado en favor de "un acuerdo común" que involucre a "todas las partes interesadas".
Bachelet emitirá un informe sobre la situación venezolana en julio. Algo ya ha insinuado. Semanas atrás consideró que las autoridades venezolanas no reconocen la "magnitud y la gravedad" de lo que ocurre, criminaliza la protesta y restringe la libertad de expresión. El Congreso, declarado en desacato por el Tribunal Supremo, anticipó que le solicitará que interceda por los 14 diputados que considera "perseguidos" por la Justicia, después de que fueran despojados de su fuero. La fiscalía los acusó de estar presuntamente vinculados con la fallida rebelión militar del pasado 30 de abril. Ellos se encuentran encuentran exiliados, en la clandestinidad o refugiados en embajadas. Por su parte, la organización no gubernamental Foro Penal le planteará la situación de las 715 personas detenidas por razones políticas.
EL DRAMA DEL ÉXODO
Uno de los aspectos que Bachelet podrá constatar de primera mano tiene que ver con las causas del éxodo de casi el 10% de la población desde que se agudizó el conflicto político. En medio de los preparativos oficiales para recibir a la ex presidenta se conoció que 92 venezolanos desaparecieron en el mar Caribe. Hace menos de un mes, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados estimó a fines de mayo que entre 3000 y 5000 personas cruzan las fronteras a diario. Desde 2015, el éxodo alcanza a tres millones de personas. Los pedidos de asilo de los venezolanos fueron en 2018 superiores a los de los sirios y afganos: casi 350.000.