En la región rebelde de la Cabilia, en armas desde hace meses, el boicot a la elecciones legislativas fue total
El FLN arrasa en Argelia, donde el 53% de los votantes se abstuvieron
El Frente de Liberación Nacional (FLN) -el antiguo partido único que gobernó Argelia con mano de hierro durante casi 30 años tras la
Las legislativas del 30 de mayo confirman también la consolidación de las opciones islamistas moderadas, a pesar de la pérdida de escaños por parte del Movimiento Social para la Paz (MSP), y de la izquieda radical, que pasará a tener una presencia importante en la Asamblea Popular Nacional (APN) a través de los trostquistas del Partido de los Trabajadores (PT) de Louiza Hanoune. Diversas encuestas ya lo apuntaban, y la victoria electoral del FLN, que con 2.632.705 de votos, el 35,52% del total escrutado, y 199 diputados (137 más que en 1997) consigue la mayoría absoluta en el Parlamento argelino, no ha sido una sorpresa para prácticamente nadie en el país. Desde luego, no lo ha sido para los electores que le han votado y en muchos casos pertenecen a sectores populares sensibles a la verborrea patriótica de los renovados dirigentes del FLN y a las redes clientelares que el ex partido único ha ido tejiendo durante varias décadas en todos los rincones del país, sobre todo en las zonas rurales más alejadas de las grandes capitales. El gran derrotado de estos comicios es, sin lugar a duda, el RND, denominado también «el partido del presidente» por haber sido creado en 1995 por el entonces jefe del Estado, el general Liamine Zerouale. Aunque se queda en segunda posición en el Parlamento tras el FLN, el RND sólo consigue 630. Otra de las grandes sorpresas de las elecciones argelinas del 30 de mayo ha sido el resultado obtenido por el PT de Louiza Hanoune, una formación de izquierda radical y de ideología trostquista que ha conseguido un cierto arraigo en sectores del mundo del trabajo y lleva años defendiendo el diálogo y el acuerdo entre todas las corrientes políticas del país. Situado en sexta posición tras los 29 diputados de listas independientes, el PT se ve ahora recompensado por los electores y consigue 355.405 votos y 21 escaños. Detrás del PT se sitúan otras cuatros formaciones políticas de diversas tendencias, entre ellas el grupo islamista Ennhda, que consiguen un total de 11 diputados. Nadie puede ya negar que la participación electoral de los ciudadanos ha sido un fracaso en toda la regla. Según los propios datos oficiales del Ministerio del Interior dados a conocer ayer, sólo un 46.09% de los electores han acudido a las urnas (19 puntos por debajo de los comicios de 1997), es decir poco más de 8.200.000 de ciudadanos con derecho a voto de los casi 18.000.000 inscritos en el censo. En la región rebelde y mayoritariamente bereber de la Cabilia, la abstención ha sido prácticamente total y en ciudades como Tizi Ouzou y Bejaïa la participación electoral sólo ha alcanzado el 1,84% y el 2,84%, respectivamente. El ministro del Interior, Nourredine Yazid Zerhouni, compareció ayer ante los medios de comunicación, argelinos y extranjeros, para comunicar los datos oficiales poco antes de las 11 de la mañana, y lo hizo con retraso sobre la hora prevista y poniendo cara de pocos amigos. El ministro acabó reconociendo que la participación electoral había sido menor a la esperada por el poder, pero alabó «la transparencia y la honestidad del sufragio».