Schröder devuelve la confianza a las filas de su partido
Después de sufrir durante los últimos cuatro meses el estigma de un partido acabado y de saborear por anticipado el sabor de la derrota, el partido Socialdemócrata alemán (SPD) puso fin ayer a un congreso extraordinario con la certeza de que aún existe una segunda oportunidad en la tierra para ganar las próximas elecciones nacionales, que tienen lugar el 22 de septiembre próximo. El responsable del milagro necesitó 85 minutos para devolver la confianza a las bases del partido, El esfuerzo fue coronado con una ovación inédita en la memoria del SPD. Gerhard Schröder fue vitoreado durante diez minutos por más de 500 delegados, que recuperaron la confianza en sí mismos y el deseo de combatir para volver a triunfar en las urnas. «Es mucho más importante llegar primero a la meta que ser el primero cuando comienza la carrera», dijo Schröder en un pasaje de su discurso que golpeó las fibras de sus camaradas de partido. «Una parte del camino ya se ha hecho, pero si queremos seguir en el camino hacia el futuro, necesitamos un nuevo mandato para continuar con nuestra política», añadió el canciller, que optó por quitarse la chaqueta para hablar ante los delegado del congreso. Gracias al discurso de Gerhard Schröder, el SPD enterró la resignación e inició los preparativos para una crucial lucha electoral.