India admite que el avión espía derribado por Pakistán era suyo

Mientras tanto, diez personas, entre ellas tres soldados, murieron por los continuos intercambios de disparos entre India y Pakistán y a causa de un ataque de presuntos extremistas islámicos. Un mujer murió ayer y otros dos civiles durante la noche por los enfrentamientos. La mujer pereció por fuego de mortero paquistaní contra el sector de Ranbir Singh Pura, en tanto que tres personas resultaron heridas. A su vez, disparos contra el distrito de Poonch provocaron los dos muertos y otros dos heridos, según fuentes indias. Según el Ejército indio, Pakistán disparó también contra las ciudades de Sawjian, Gajrian y Poonch, sin que hubiera heridos. Entretanto, cuatro miembros de un grupo de autodefensa de un poblado murieron durante la noche en un enfrentamiento con presuntos musulmanes armados que habían entrado a la localidad. La policía ha lanzado una intensa búsqueda de los atacantes. Tres soldados indios cayeron a su vez hoy en un enfrentamiento con extremistas musulmanes cerca de la Línea de Control que divide Cachemira, en el distrito Poonch. La agencia india UNI citó a un portavoz del Ejército que aseguró que todo comenzó cuando se detectó a algunos militantes que intentaban cruzar la LoC desde Pakistán. Al ser descubiertos abrieron fuego y causaron la muerte de los tres soldados. El viernes, Estados Unidos dijo que las incursiones en la parte india de Cachemira desde territorio paquistaní se han reducido «significativamente», si bien no han parado del todo. Gran Bretaña asegura que su país está dispuesto a hacer todo aporte necesario para bajar la tensión por Cachemira, aunque su ministro de Defensa no ha anunciado ningún plan concreto para apaciguar la zona en conflicto.