Los seis militantes palestinos detenidos son responsables de la muerte de 35 personas en varios atentados
Israel desarticula en Jerusalén el comando más activo de Hamas
Los servicios secretos israelíes y la Policía desarticularon un comando islámico palestino al que responsabilizan de la muerte de 35 person
El servicio de inteligencia para el interior y la Policía israelí han desarticulado en Jerusalén oriental al comando más activo de Hamas, al que se atribuyen al menos ocho de los atentados más graves que se han cometido en los últimos meses y que han costado la vida a 35 personas. La detención de cinco de sus miembros se produjo el sábado último. Tres de los detenidos viven en el barrio de Silwan, que se halla justo al sur de la ciudad amurallada, y los otros dos viven en barrios situados en el límite de Jerusalén. Los miembros del comando que residen en Jerusalén tienen documentación israelí -algo que no siempre ocurre con los habitantes palestinos de Jerusalén- lo que les permitía desplazarse libremente por todo el país sin levantar sospechas. Todos los detenidos tenían entre 25 y 31 años. Matanza en la Universidad Las fuerzas de seguridad no ocultan su sorpresa ante el hecho de que un comando de Hamas tan activo trabajara en el mismo centro de Jerusalén y que cometiera un gran número de atentados sin ser detectado pese a la fuerte presencia policial y del Shin Bet en el sector de la ciudad ocupado en 1967. Entre los atentados que se le atribuyen figuran el de la cafetería Moment en el que murieron once personas en marzo y el del restaurante de la Universidad Hebrea, en el que murieron nueve personas en julio. Muhammad Uda, de Silwan, fue quien cometió el atentado en la Universidad Hebrea, donde estaba trabajando como pintor. Uda introdujo la bomba en el campus la noche anterior y la escondió entre unos matorrales. Al día siguiente, tras pasar el control de seguridad que hay en la entrada al campus, la recogió y la dejó en una mesa del restaurante, salió y activó la bomba a distancia por medio de un teléfono. El comando se disponía a cometer otro atentado en el centro de Israel el sábado cuando fue desarticulado. La Policía desactivó la bomba que pensaban utilizar y que estaba escondida en la carretera que une Jerusalén con Tel Aviv. La detención del comando se anunció poco después de que el Ejército llevara a cabo una operación en la franja de Gaza en la que participaron tanques y helicópteros.