Es la segunda acción de la guerrilla separatista chechena en dos semanas
Mueren dos militares en un nuevo ataque a un helicóptero ruso
Dos militares rusos murieron ayer cuando la guerrilla separatista abatió con un misil un helicóptero de combate Mi-24 en Chechenia, en el segundo descalabro del ejército en
El derribo, segundo en menos de dos semanas de un helicóptero de las tropas rusas estacionadas en la región separatista y que elevó a 120 el número de víctimas mortales en ambos incidentes, se produjo a las 15.45 hora local (11.45 GMT), añadió Deriabin. Un misil «Strelá» (flecha) de los guerrilleros islámicos abatió el pasado día 19 un helicóptero gigante Mi-26 junto a Grozni, la capital chechena, en el mayor desastre en la historia de las Fuerzas Aéreas de Rusia. De los 147 ocupantes del Mi-26, autorizado únicamente para llevar 83 personas como máximo, 118 fallecieron y otros 29 resultaron con heridas de diversa gravedad. Chechen Press, órgano de los separatistas, dijo que el derribo de ayer también se produjo por el disparo de otro misil «Strelá» por parte de un «comando móvil». Pero otro órgano propagandístico de los guerrilleros chechenes, Kavkaz Center, informó de que el misil empleado era del tipo «Iglá» (aguja), que «impactó directamente» en el Mi-8 y que el helicóptero «se precipitó a tierra desde gran altura». Kavkaz Center afirmó que tras abatir al helicóptero, el comando de «muyaidines» se aproximó al lugar del siniestro «y se apoderó de las armas de los pilotos». «El sábado a las 15,45, al acompañar al helicóptero de transporte Mi-8 que llevaba alimentos para las unidades que actúan en las zonas montañosas de Chechenia, se abrió fuego, y como resultado sufrió un accidente un Mi-24 de combate», informó Deriabin. La agencia oficial rusa Itar-Tass informó previamente de que uno de los dos Mi-24 que escoltaban a un helicóptero de transporte Mi-8 fue abatido en las proximidades de Mesketi, junto a la divisoria con la región vecina de Daguestán. Los rebeldes situaron la «operación» junto a Nozhai-Yurt, en la misma zona pero un poco más al sur. Portavoces militares explicaron que el Mi-24 que iba delante del convoy aéreo se dio cuenta de que detrás suyo no volaba el segundo helicóptero de escolta, y que sus pilotos retrocedieron para ver qué le había pasado. «A dos kilómetros al oeste de Mesketi, vieron sus restos en el suelo», manifestaron las mismas fuentes, al decir que inmediatamente se envió un equipo de rescate al lugar de la catástrofe, aunque sólo pudo recuperar los dos cadáveres.