Cinco palestinos mueren en las protestas contra el encierro

Cuatro palestinos murieron en Cisjordania ayer a causa de una lluvia de disparos de los soldados israelíes, mientras que treinta manifestantes resultaron heridos. Al mediodía (local) un niño de 13 años murió en Nablus bajo fuego israelí en una nueva manifestación. Durante todo el día, hubo muestras de apoyo a Arafat en los territorios palestinos. El movimiento Fatah de Arafat emitió un comunicado en el que amenaza con represalias si Israel hiere a su líder. En Gaza, alrededor de 6.000 personas se manifestaron en las calles, a los que se unieron miembros de Hamas y Yihad Islámica. Una declaración del asesor de Arafat Nabil Abu Rudeneih, transmitido por la agencia de noticias palestina WAFA, rindió tributo a aquellos que tomaron las calles para apoyar «los lugares sagrados, los mártires, los heridos y sus líderes». Por su parte el diario israelí Haaretz comentó en un editorial que el asedio de la sede del presidente palestino en Ramallah, como respuesta de la cúpula israelí a los últimos atentados terroristas palestinos, «es un intento burdo e incluso dañino de hallar una salida a la situación».