La ambiciosa ampliación de 15 a 25 estados podría costar cerca de 40.000 millones de euros

La próxima ampliación de la Unión Europea (UE) de 15 a 25 Estados miembro a partir de 2004 podría costar, según la Comisión Europea, cerca de 40.000 millones de euros (cifra muy similar en dólares). En la etapa preparatoria de tres años desde el ingreso formal, en 2004, hasta la plena incorporación funcional, en 2006, será necesario reformar las estructuras de la UE para que la brecha entre Estados ricos y menos favorecidos se reduzca y se equiparen los niveles, un proceso complejo que podría insumir al menos 25.000 millones de euros. Pero sobre ese tema, ni la Comisión, el «Ejecutivo» de los Quince, ni los Estados miembro actuales han unificado posturas. Alemania, el principal contribuyente neto a las arcas de la UE, considera que la abultada cifra de 40.000 millone de euros es desproporcionada. Además, Berlín condiciona su apoyo a que se produzca una equiparación de las ayudas directas que se concederán a los agricultores de los «nuevos» países de la Unión, muchos de ellos del ex bloque del este, con otras para los «viejos» países, los actuales 15. Otro de los temas polémicos es cómo se ayudará a los nuevos países para que desde el principio no tengan que asumir el papel de contribuyentes netos nada más ingresar al grupo. Se trata de que en una fase transitoria- no paguen más de lo que reciben de Bruselas. Entre los resortes figuran diversas ayudas presupuestarias y un esquema que permita pagarles anticipadamente de los Fondos Estructurales. Sobre esos puntos no se ha llegado todavía a ningún consenso y para ello se aguarda con impaciencia la próxima cumbre de la UE en Bruselas, el 24 y 25 de octubre.