Lady Gaga envuelve el gran día de Biden
Su gesto después de entonar el himno de EE UU lo decía todo. Lady Gaga, acostumbrada a grandes eventos, a triunfos y éxitos en distintos foros, pareció empequeñerse -mide 1,55- tras descender la escalinata y dirigirse a tomar asiento. Antes, durante su actuación, se la vio enorme, envuelta en una falda roja que llevaba la firma de Schiaparelli. Un diseño realizado en exclusiva para la ceremonia de investidura de Joe Biden -el más escéntrico, como no, de todos- en el que destacaba un gran broche, en forma de pájaro dorado, que simbolizaba la paz, la unidad. Su tímida sonrisa, como pareciendo buscar la aprobación del selecto grupo de invitados que ayer se citaron en el Capitolio, no dejaba lugar a dudas: había protagonizado la actuación de su vida.
«Hola, soy Lady Gaga. Votaré por América, lo que significa que votaré por Joe Biden, dijo en plena campaña electoral.
Otra demócrata convencida también estuvo en la toma de posesión. La cantante y actriz Jennifer Lopez, de blanco inmaculado de Chanel y pendientes de la misma firma, interrumpió su interpretación de la tradicional ‘This Land is Your Land’ para, en español, reclamar «libertad y justicia para todos».