Al menos 6 muertos al estallar dos bombas en Filipinas

Este atentado se produce cinco días después de la sangrienta masacre de la isla de Bali. La alcaldesa de Zamboanga, María Clara Llobregat, confirmó que la primera explosión se produjo hacia las 11,30 hora hora local (5,30 en España) en el centro comercial Shop-o-rama del centro de la ciudad. Poco después, y cuando todavía reinaba la confusión en el área, estalló un segundo artefacto en otro local comercial, el Shopper''s Central, del mismo lugar y contiguo al anterior. Llobregat añadió que la policía encontró otros artefactos defabricación casera en diferentes zonas del distrito comercial de Zamboanga, si bien éstos pudieron ser desactivados. Al parecer todos los heridos, en su mayoría mujeres y niños, son ciudadanos filipinos, según confirmó la alcaldesa. Las víctimas fueron trasladadas a cuatro hospitales de la ciudad, algunas de ellas con mutilaciones y quemaduras de gravedad. Aunque por el momento se desconoce la autoría de estos atentados, la Policía interroga a dieciséis personas, entre ellas un malasio y dos nacionales turcos, que se encontraban cerca del lugar cuando ocurrieron las explosiones. En referencia a la posibilidad de que este atentado esté vinculado al ataque contra una discoteca de Bali, que dejó el sábado 190 muertos y más de 300 heridos, Ebdane expresó su confianza en que «se trate de un incidente local y no tenga ninguna conexión con ello». Sin embargo, fuentes militares atribuyeron las bombas de ayer a grupos radicales islámicos, como la organización Jemaah Islamiya, supuesta responsable del ataque de Bali. En el sur de Filipinas actúa también la guerrilla musulmana Abu Sayyaf, que combate por un estado islámico independiente y a la que los gobiernos de Washington y Manila vinculan asimismo con la red de Osama Bin Laden. La ciudad de Zamboanga ya ha sido objeto de otros ataques. El último ocurrió a principios de este mes, cuando un soldado de EE.UU. y dos filipinos murieron al estallar una bomba en un bar de la ciudad. Pocos días después, ocho personas murieron y otras 19 resultaron heridas al estallar otro artefacto en la estación de autobuses de la ciudad de Kidapawan, en Mindanao.