EE.UU. suaviza su discurso sobre Irak y admite una resolución de la ONU
En un intento de desbloquear las negociaciones en el Consejo de Seguridad de la ONU respecto a un ataque a Irak, EE.UU. admitió ayer un compromiso para salvar la recia oposición de los países contrarios al uso automático de la fuerza contra el régimen de sadam. La nueva propuesta pasa por una doble resolución: una en la que se concretarian al detalle las condiciones d ela inspección de la ONU y otra segunda que prevea el uso automático d ela fuerza en caso de que la primera fuera incumplida. çFrancia, opuesta desde el principio al ataque a Irak, es la única que se mantiene sin aceptar el compromiso, aquen las nuevas propuestas estadounidenses coinciden con sus demandas, por lo que se espera que ceda en las próximas horas. Previamente, todos los países que intervinieron ayer en el debate público que se celebraba en la ONU sobre la crisis en Irak fueron unánimes en un punto: el Consejo de Seguridad es el único órgano que tiene el poder de decidir el uso de la fuerza. Y todos han advertido de que «cualquier acción unilateral» que se adopte contra el régimen iraquí socavará la autoridad y la credibilidad de la ONU para el futuro. De esa forma, todos los países lanzaron un llamamiento claro a Estados Unidos, cuyo Congreso ha autorizado al Gobierno a llevar a cabo una intervención militar en Irak e, incluso, a actuar al margen de la ONU si considera agotadas todas las posibilidades de una solución diplomática. Uno de los intervinientes que mejor resumió esa posición común fue el embajador brasileño, Gelson Fonseca, quien afirmó que «el uso de la fuerza sólo debe ejercerse de acuerdo con la Carta de las Naciones Unidas de forma consistente con la determinación del Consejo de Seguridad».