El estallido de violencia en cuatro cárceles de Ecuador deja ya 79 muertos
Los motines que estallaron este martes en varias cárceles de Ecuador arrojan ya un balance de 79 reclusos muertos. La masacre tiene sus orígenes, según informa la prensa local, en la muerte del líder de la banda Los Choneros, conocido como Rasquiña, el pasado diciembre, que dejó un vacío de poder en la organización criminal dentro de los centros penitenciarios entre las diferentes bandas. Las autoridades esperaban ya entonces una reacción inmediata.
La violencia estalló en los centros Regional Guayaquil, Penitenciaría del Litoral, Turi y Cotopaxi, donde se desplegaron grupos tácticos de la Policía y militares de apoyo que lograron restablecer el orden al anochecer. Aunque no hay bajas entre los cuerpos de seguridad, sí que han sufrido heridos. En la cárcel de Turi, en Cuenca, hubo 33 víctimas mortales entre los presos; en la de Guayaquil, 28; ocho más en Latacunga, capital de la provincia de Cotopaxi, y seis en la Penitenciaria del Litoral, también ubicada en Guayaquil.
En las afueras de la penitenciaría de Guayaquil, unas 40 mujeres trataban de tener noticias de sus familiares. Daniela Soria, una madre de 29 años, aseguró haber recibido una transmisión de voz de Ricardo, su esposo sentenciado a tres años por narcotráfico. «¡Me van a matar, sácame de aquí. Diles que me cambien de pabellón!», se escucha decir al hombre en el mensaje por WhatsApp que compartió Soria con un periodista de AFP. «Allí adentro es como un mercado. Hay de todo: drogas, armas, hasta perritos. Todo se vende», según Soria. «Cuando los presos ven la violencia venir, se encierran con candados en sus celdas», narró antes de salir corriendo detrás de una ambulancia.
El sistema penitenciario de Ecuador está compuesto por cerca de 60 centros con capacidad para 29.000 personas y cuenta con 1.500 guardias. Pero hay hasta 38.000 encarcelados.