Un congreso debate sobre Chechenia en Dinamarca
El gobierno de Dinamarca, que ejerce la presidencia de la Unión Europea (UE) en el presente semestre, decidió ayer trasladar de Copenhague a Bruselas una reunión de la dirigencia comunitaria con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, con motivo de la controvertida acción rusa para liberar a los rehenes en Moscú. Putin había amenazado a Dinamarca con no asistir a la reunión, programada para el 11 de noviembre en Copenhague, debido a que el gobierno danés se negó a atender una petición de Moscú para prohibir la celebración en la capital danesa, este lunes, de un «congreso mundial» de grupos chechenos en el exilio. En una nota diplomática enviada el domingo a Copenhague, el Kremlin había criticado la actitud del gobierno de Dinamarca, calificándola como una «manifestación de solidaridad de las autoridades danesas con los terroristas chechenos». El ministro danés de Relaciones Exteriores, Per Stig Moler, rechazó la demanda rusa de prohibir el congreso checheno en Copenhague, pero más tarde anunció el traslado a Bruselas de la proyectada reunión con Putin como «solución pragmática para evitar que se envenene la relación de la UE con Rusia». La realización de la reunión chechena en Copenhague también motivó a Putin a suspender su visita de Estado a Dinamarca, programada para el 12 de noviembre. Masjádov quiere negociar En medio de la tormenta, el presidente checheno, Aslán masjádov, afirmó ayer que está dispuesto a celebrar conversaciones con el gobierno de Moscú «sin condiciones previas», para buscar una solución política que ponga fin al largo y sangriento conflicto de Chechenia. Así lo afirmó ayer su portaoz en el congreso que se celebra en Copenhague. La reunión en la capital danesa ha provocado las protestas de Moscú. Sin embargo, en ella se reúnen representantes de los chechenos en el exilio, políticos daneses, rusos, estadounidenses y otros, bajo el patrocinio de la ONU en un intento de buscar una solución al conflicto checheno. El congreso, al que también asisten organizaciones no gubernamentales de derechos humanos y Ongs presentes en el territorio de la república separatita, estaba convocado mucho antes de la crisis de los rehenes y se ha celebrado a pesar de las protestas rusas y se clausurará hoy.