Irán sanciona a 51 estadounidenses por su papel en el asesinato de Soleimaní

Irán sancionó a otros 51 estadounidenses por estar involucrados en el ataque con un dron que, el 3 de enero de 2020, acabó con la vida del general Qasem Soleimaní y sus acompañantes en Bagdad, según informó ayer el Ministerio de Exteriores iraní.

Entre los nuevos sancionados están el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de EE UU, Mark Milley; el asesor de la Seguridad Nacional estadounidense, Robert Charles O’brien Jr; el subsecretario adjunto de Seguridad Nacional, Matthew F. Pottinger; y el jefe del Comando Central de EE UU. (Centcom), el general Kenneth McKenzie. La lista también incluye al fundador de la firma militar privada Blackwater, Erik Dean Prince; y a la exrepresentante de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Nimarta Nikki Haley.

El comunicado emitido por el Ministerio de Exteriores de Irán señala que los sancionados participaron en la toma de decisiones, planificación, organización, financiación, apoyo, dirección o implementación del acto terrorista contra Soleimaní o «apoyando a ese crimen atroz han promovido el terrorismo que es una amenaza para la paz y seguridad internacional».

En octubre de 2020 y enero de 2021, Irán había sancionado a varios responsables estadounidenses por el atentado contra Soleimaní, incluidos Donald Trump, que en aquel momento era presidente de EE UU; su secretario de Estado, Mike Pompeo; y el exsecretario de Defensa Mark Esper, entre otros. Las nuevas sanciones, como las anteriores, permiten confiscar los bienes delos sancionados en Irán.

La nueva lista se publica en medio de las negociaciones que se están llevando a cabo en Viena (Austria) para rescatar el acuerdo nuclear de 2015. Irán y Alemania, Francia, Reino Unido, China, Rusia y Estados Unidos, de forma indirecta, tratan de recuperar el acuerdo que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones estadounidenses.