Rescatan con vida a una familia tras 13 días bajo los escombros
Sube a 44.330 la cifra oficial de víctimas mortales en Turquía y Siria por el terremoto
Tres personas —entre ellos un niño que murió después— fueron rescatadas ayer con vida tras 296 horas atrapados bajo los escombros de un edificio derruido en la ciudad turca de Antioquía por los fuertes terremotos que asolaron la región hace trece días.
Según informó la agencia oficial Anadolu, un equipo de rescate de Kirguizistán logró salvar a Samir Muhammed Accar, su esposa Ragda y su hijo de 12 años, que habían quedado bajo las ruinas del edificio de apartamentos donde tenían su vivienda. Poco después, la misma fuente indicó que el niño había fallecido tras su rescate, mientras que los dos adultos fueron hospitalizados con heridas de diverso grado.
Los cuerpos de otros dos niños de la misma familia fueron recuperados de las mismas ruinas.
El equipo de Kirguizistán es uno de los pocos internacionales que quedan en el país euroasiático, pues la mayoría han regresado ya a sus países.
Al menos 44.330 personas perdieron la vida en los fuertes terremotos que asolaron el sureste de Turquía y el norte de Siria hace trece días, según los balances oficiales.
El servicio de emergencias turco Afad cifró ayer en 40.642 las víctimas mortales de los seísmos registradas hasta ahora, informó la agencia oficial Anadolu. A ellas se suman las 3.688 contabilizadas en Siria por el grupo de rescatistas Cascos Blancos, que opera en la región opositora noroccidental, y la agencia oficial siria Sana, que ofrece el recuento de todas las demás zonas bajo el Gobierno del presidente sirio Bachar al Asad.
Trece días después del siniestro, estos datos con solo un balance provisional, ya que aún quedan decenas de miles de cuerpos bajo los escombros y diversas estimaciones prevén que el saldo final rondará o superará 100.000 muertos.
El número de heridos se eleva a 122.757 (108.000 en Turquía y 14.757 en Siria). Según Afad, unas 260.000 viviendas han quedado destruidas en Ankara y 430.000 personas han sido evacuadas hasta ahora por las autoridades turcas.
El Gobierno de Estambul anunció ayer que más de 50.000 alumnos de 93 escuelas de la ciudad serán transferidos a partir demañana lunes a otros centros educativos en edificios construidos a prueba de terremotos. La medida se adopta después de los dos fuertes terremotos, de 7,7 y 7,6 grados de magnitud.
Los expertos vienen advirtiendo desde hace años que Estambul, la mayor urbe de Turquía, puede sufrir en cualquier momento un devastador seísmo. La catástrofe humanitaria, considerada el peor desastre que sufre la región en más de un siglo, ha desatado una virulenta discusión por la falta de construcciones específicas para soportar seísmo, y ha hecho sonar la alarma especialmente en Estambul. Los datos oficiales indican que en la ciudad hay más de un millón de edificios, de los que, según los expertos, 250.000 se derrumbarían en caso de un terremoto de 7,5 grados de magnitud, mientras que otros 91.810 sufrirían daños graves o muy graves, y más de 167.000 quedarían con daños de mediana dimensión.