Biden endurece el control: «Si tiene antecedentes violentos no compre armas»
Una orden ejecutiva obliga a los vendedores a comprobar si el cliente ha cometido delitos
En lo que va del año se han producido más de un centenar de tiroteos en Estados Unidos, la mayor cifra de la última década. Las frecuentes masacres que sacuden al país han motivado al presidente Joe Biden a endurecer las medidas de acceso a las armas de fuego, entre las que figuran la nueva aplicación de límites a la venta de arsenales que obligará, a partir de ahora, a verificar los antecedentes penales de los potenciales compradores y someter a un seguimiento estricto a los comercializadores. «Es solo sentido común: verificar si alguien es un delincuente o un maltratador doméstico antes de comprar un arma», dijo el presidente al anunciar la nueva batería de medidas. Biden ordenó también al fiscal general, Merrick Garland, que ajuste la definición legal de los vendedores para implementar sanciones en caso de que incumpla la orden de revisar el historial delictivo de un cliente antes de efectuar una venta.
La Casa Blanca pedirá a la Comisión Federal de Comercio que analice cómo las empresas comercializan y, además, promueven el uso de armas de fuego entre los menores de edad. Y propone más y mejores condiciones para el almacenamiento seguro de municiones, ya que se ha confirmado que la inexistencia de armeros o la práctica habitual de dejar un arma cargada en casa está detrás de la mayoría de muertes por bala ocurridas en el ámbito doméstico. El episodio más reciente ocurrió esta misma semana cuando una niña de 3 años mató accidentalmente a su hermana, solo un año mayor que ella, cuando jugaban en su casa en Texas. Al parecer, la pequeña encontró la pistola cargada y sin el seguro puesto de un familiar y apretó el gatillo durante uno de los juegos.