Cerrar

El jefe de Wagner propone parar la ofensiva y defender lo ya ocupado

El líder de los mercenarios rusos insta a poner «punto final» a la Operación Militar Especial

Dos niñas con canastas de huevos pintados y kulichi, un pastel tradicional de Pascua. SERGEY DOLZHENKO

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

A través de un manifiesto difundido por su servicio de prensa, el jefe de los mercenarios rusos del Grupo Wagner, Evgueni Prigozhin, insta a poner «punto final» a la llamada Operación Militar Especial en Ucrania, término con el que Putin bautizó la invasión del país. «Para las autoridades y para la sociedad en su conjunto, hoy es necesario poner algún tipo de punto final», dijo.

Según sus palabras, «la opción ideal sería anunciar el final de la Operación Militar Especial, informar a todos que Rusia ha alcanzado los objetivos que planeó y, en cierto sentido, los hemos logrado (...) Ha sido aniquilada una gran parte de la población masculina activa de Ucrania y se ha intimidado a otra parte, la que huyó a Europa».

«Rusia ha cortado el acceso al mar de Azov y a un buen trozo del mar Negro, se apoderó de una parte del territorio ucraniano y creó un corredor terrestre hasta Crimea», sostiene Prigozhin en su artículo.

El jefe de los Wagner, próximo a Putin, considera que ahora lo importante sería «mantener hasta la muerte los territorios ya ocupados, conservarlos con uñas y dientes», en referencia a Lugansk y a los sectores en poder de las tropas rusas de Donetsk, Jersón y Zaporiyia, anexionados por Moscú el año pasado, además de Crimea, que fue incorporada a Rusia en marzo de 2014. Prigozhin advierte de que de no darse por terminada la operación militar rusa «las fuerzas armadas de Ucrania llevarán a cabo la contraofensiva (...) uno de cuyos resultados podría ser que consigan romper las defensas rusas en algún lugar».

El líder de los mercenarios avisa también sobre cualquier acuerdo con Kiev que suponga la devolución de territorios, ya que en su opinión «pondría en marcha el mecanismo de fuerzas centrífugas en las regiones rusas», sugiriendo que sería el comienzo de la desintegración de la Federación Rusa. «Rusia no puede aceptar ningún acuerdo», asegura Prigozhin, quien estima, en suma, que «una victoria de Ucrania haría que Rusia comenzase a declinar y llevaría a cambios profundos en la sociedad rusa».

El portavoz de la Dirección Central de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Andri Yúsov, señaló esta semana que las autoridades rusas se conformarían ahora con un «empate». Según Yúsov, «hace tiempo que las élites rusas perdieron la fe en la victoria contra Ucrania, pero esperan un empate, una situación de punto muerto que les permita mantener ciertos intereses», en alusión a las zonas de Ucrania actualmente bajo ocupación rusa.

El Instituto para el Estudio de la Guerra estadounidense cree que las tropas rusas han agotado su potencial ofensivo al haber «perdido la capacidad de realizar varias operaciones de ataque en paralelo».

Los analistas del Pentágono ponen como ejemplo la reciente transferencia de unidades rusas desde Avdiivka a la región de Bajmut, donde según la Inteligencia militar británica, han logrado algunos avances. «Los grupos de asalto del Grupo Wagner siguen realizando los mayores avances en el centro de la ciudad, mientras que las tropas aerotransportadas rusas han dado apoyo a los mercenarios de Wagner desplegados en los flancos norte y sur» de Bajmut, sostiene la Inteligencia militar del Reino Unido.

El Ministerio de Defensa ruso había anunciado que sus fuerzas, que dicen controlar el 80% de Bajmut, tienen ya cercado allí a la resistencia ucraniana, algo que desmintió el propio Prigozhin y los militares ucranianos. El portavoz de las tropas ucranianas en el este del país, Sergui Cherevati, dijo que el Ejército de Kiev conserva todavía la posibilidad de «recibir alimentos, municiones y medicamentos desde la retaguardia».

Cargando contenidos...