Italia se vuelca en el funeral de Berlusconi: "Solo Dios está por encima de Silvio"
"Para mí en lo más alto está Dios, luego Silvio Berlusconi y en el tercer escalón, mi padre. Solo Dios está por encima de Silvio". Vito gesticula extendiendo la mano derecha para enfatizar la clasificación de sus afectos personales mientras espera a que comience el funeral de Estado en el Duomo de Milán del exprimer ministro italiano, fallecido el pasado lunes a los 86 años.
Este emigrante del sur del país que trabaja en la capital lombarda desde hace cinco años es de los más madrugadores, porque llegó a la plaza que se extiende frente a la catedral a las siete de la mañana, ocho horas antes de que comiencen las exequias a las 15:00 horas. Las seguirá por medio de las pantallas gigantes instaladas en la explanada del Duomo, como los otros miles de seguidores del magnate que ondearon banderas de su partido, Forza Italia (FI) y de los dos equipos de fútbol que ha controlado, el AC Milan y el Monza.
"Berlusconi es el político con el que he crecido. Siempre he estimado su personalidad, profesionalidad y pensamiento político. Es un hombre que nació de la nada y construyó un imperio", explica Vito, que ha hecho propio el discurso que siempre ofreció el magnate de hombre hecho a sí mismo.
Enamorado de él Militante de FI y asiduo espectador de los canales de televisión de Mediaset, el conglomerado audiovisual del magnate, Vito, de unos 40 años, recuerda el momento en que se "enamoró" de él. "Fue cuando llegó al estadio del Milan en helicóptero. Yo era entonces un niño y aquello fue impresionante".
También lleva desde muy temprano en la plaza del Duomo para poder seguir el funeral desde primera fila Letizia, una señora de unos 60 años que era amiga personal de Rosa, la madre de Berlusconi. "No tengo palabras. Llevo tres días llorando", cuenta mientras le caen las lágrimas por las mejillas. "Yo ni soy de FI ni he trabajado para sus empresas. Pero es que sentía una gran amistad y respeto por su madre, que era una mujer fabulosa, y también por Silvio. Él ha representado el sueño italiano y ha demostrado que se puede conseguir todo en la vida si trabajas mucho".
Expresando un sentimiento común en muchos italianos, que se han lanzado estos últimos días a exaltar los valores del fallecido exmandatario olvidando los escándalos en que se vio envuelto, Letizia pide que "se callen" quienes le critiquen. "No es el momento, ahora toca bajar la cabeza ante la muerte e intentar llevar adelante el sueño que el tenía".
Ese sueño del que hablan los seguidores de Berlusconi no será fácil que continúe en el campo político, pues se antoja difícil que FI consiga sobrevivir a la figura de su fundador. "Es un momento oscuro, de conmoción para todos. Ahora tenemos que pensar en este último saludo al presidente, pero más adelante deberemos meditar sobre qué pasará con el futuro del partido", cuenta un señor de mediana edad apellidado La Cava y que ha viajado a Milán desde Cosenza, en el sur del país, para participar en las exequias.
Menos interesada por la faceta política de Berlusconi y más por su carrera como presidente del AC Milan, con el que ganó cinco Copas de Europea, estaba Cinzia, una profesora de Educación Física que acudió a despedir "al único y gran presidente del equipo" de fútbol de sus amores. "Llevó al Milan al máximo nivel del mundo. Fue un gran empresario y un gran revolucionario, una persona que miraba al futuro, aunque algunos no lo entendieran. Si tantas personas lo han querido tanto, habrá un motivo para ello", concluye Cinzia.