Más de medio millón de personas han huido de Sudán
A ellos se suman los 3,7 millones de desplazados internos
Más de 500.000 personas se han visto desplazadas de Sudán a causa del conflicto desde el pasado 15 de abril entre su Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), dijo este martes el jefe de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Filippo Grandi.
«En el Día mundial de los Refugiados, desgraciadamente, hemos alcanzado una cifra muy triste: más de 500.000 personas han huido hasta ahora de los enfrentamientos en Sudán hacia países vecinos», dijo a través de la red social Twitter Grandi, que visitó esta semana Kenia.
«Medio millón de refugiados. Las armas deben silenciarse si queremos que se detenga este éxodo», añadió el alto comisionado, tras reunirse ayer en Nairobi con el presidente keniano, William Ruto, después de visitar este lunes el campo de desplazados de Kakuma, situado en el noroeste del país y donde viven más de 200.000 solicitantes de asilo y refugiados. El funcionario destacó la importancia de «incluir» a los refugiados en las comunidades a las que llegan, de modo que «puedan optar a empleos, inscribirse en colegios y acceder a servicios básicos como vivienda y atención sanitaria», según un comunicado difundido tras su visita a ese campamento.
Asimismo, Grandi subrayó la «solidaridad» de los países que acogen a las personas desplazadas, incluyendo los vecinos de Sudán, como Chad, República Centroafricana (RCA), Etiopía, Egipto y Sudán del Sur.
El alto comisionado hizo estas declaraciones después de que el secretario general de la ONU, António Guterres, afirmara este lunes que «el tamaño y la rapidez con la que Sudán ha descendido a la muerte y a la destrucción no tienen precedentes». «Les llamo a que proporcionen financiación para salvar vidas y apoyar a quienes viven en las condiciones más difíciles y peligrosas», dijo el portugués durante una intervención telemática en una conferencia de donantes para apoyar al país y a sus vecinos que logró reunir la mitad del dinero necesario (promesas por 1.500 millones de dólares frente a los 3.000 millones solicitados).
A las personas que han tenido que abandonar sus hogares y huir dentro de Sudán o hacia otros países por el conflicto, se suman los 3,7 millones de desplazados internos con los que ya contaba el país, principalmente en Darfur (oeste). Se desconoce la cifra exacta de víctimas por los combates, que se estima en unos 1.173 civiles.