Ucrania pide más presión contra Rusia: «Será un paso hacia la paz»
Kiev lleva la iniciativa en la guerra de los drones, con los que ataca infraestructuras rusas
Ucrania ha pedido a la comunidad internacional que aumente la presión sobre Rusia, mientras continuaban los bombardeos de ambos bandos en zonas fronterizas y la retaguardia del enemigo.
«Cada manifestación de presión sobre Rusia es un paso hacia la paz. Cada acto de asistencia a Ucrania es protección de vidas. Estoy agradecido a todos los que apoyan a Ucrania», dijo el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en un discurso.
Precisó que se refiere, en particular, a las sanciones económicos contra Moscú. «Se necesita un nuevo paquete de sanciones de la Unión Europea y lo estamos preparando. También estamos preparando nuevas medidas para limitar la capacidad de Rusia de eludir las sanciones», afirmó.
Confiscar los activos
Además, Ucrania está trabajando activamente para hacer realidad la confiscación de los activos rusos congelados en el extranjero, señaló Zelenski. «Estamos haciendo todo lo posible para que esta decisión esté bien preparada en un futuro próximo. Gracias a todos los que nos están ayudando a avanzar en este mecanismo de justicia», dijo el líder ucraniano.
Moscú, a su vez, ha acusado a Kiev y Occidente de intentar «robar» sus activos y ha prometido una respuesta «dolorosa» a los implicados si ese plan es finalmente ejecutado. En tanto, ambos bandos continuaron este domingo los ataques en el frente y la retaguardia enemiga.
Ucrania informó ayer de un ataque nocturno ruso contra infraestructuras críticas de cuatro regiones del país que causaron al menos tres heridos.
De acuerdo con la Fuerza Aérea ucraniana, en los bombardeos fueron utilizados ocho drones Shahed, dos misiles Iskander y tres cohetes S-300.
El Ministerio de Defensa de Rusia admitió bombardeos de objetivos en las regiones de Dnipropetrovsk y Zaporiyia, pero aseguró que su objetivo eran los depósitos de munición y combustible.
Además, fueron golpeadas «118 posiciones de artillería, así como personal y equipo militar en 137 distritos», señaló el departamento castrense ruso. Mientras, Viacheslav Gladkov, el gobernador de la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Ucrania, denunció ataques en cinco municipios a lo largo de las últimas 24 horas.
Según escribió Gladkov en Telegram, durante esos ataques, las fuerzas de Kiev lanzaron 40 proyectiles contra distintas localidades de la región rusa.
Además, los militares ucranianos usaron drones con explosivos para atacar viviendas e infraestructuras en la región, agregó y precisó que los bombardeos no han dejado víctimas, pero sí han dañado varias casas, vehículos y líneas eléctricas.
La cadena CNN aseguró ayer, citando a funcionarios ucranianos, que «Rusia está llevando a cabo operaciones ofensivas a lo largo de gran parte de la línea del frente, mientras el ejército ucraniano intenta mantener sus posiciones» ante la escasez de municiones. Los combates son especialmente intensos en el noreste a lo largo de una franja de territorio donde se unen las regiones de Járkov y Lugansk y Luhansk. «El enemigo está acumulando fuerzas y ataca todos los días», dijo un militar ucraniano, citado por el medio.
A la vez, la revista Forbes destaca en uno de sus artículos publicados este fin de semana que la presente etapa de la ofensiva rusa en Ucrania se ha visto obstaculizada por las ventajas de Kiev en la «guerra de drones». «A medida que la guerra pasa a su siguente fase, el ejército ruso ha comenzado una nueva operación ofensiva y las fuerzas ucranianas están asumiendo la postura defensiva. En esa coyuntura, Ucrania parece llevar la ventaja en la ‘guerra de drones’.