Al menos nueve muertos y 736 heridos en el peor terremoto ocurrido en 25 años en Taiwán
El seísmo de 7,2 grados obligó a activar la alerta por tsunami y dejó a 77 ciudadanos atrapados
Restos del derrumbe de una fábrica después de que colapsara tras el terremoto. DANIEL CENG
Taiwán acababa de comenzar el miércoles cuando, apenas un par de minutos antes de las 8:00 horas, un terremoto de 7,2 grados desató el pánico en la isla. El seísmo registrado cerca de la costa se cobró al menos la vida de nueve personas y causó más de 736 heridos, aunque se teme que el número de víctimas pueda aumentar ya que decenas de ciudadanos quedaron atrapados en túneles y bajo los escombros de los edificios que no aguantaron la sacudida. Hacía 25 años que los taiwaneses no sufrían un episodio tan grave.
El epicentro del terremoto se registó cerca del montañoso pueblo de Hualien, aunque sus réplicas, más de medio centenar por ahora, se notaron hasta en Taipei, la capital. «Fue muy fuerte. Sentí como si la casa fuera a derrumbarse», relató Chang Yu-lin, un sexagenario que trabaja en un hospital de esta ciudad. En Fujian y Shanghai (China) hubo temblores, en Okinawa (Japón) detectaron pequeñas olas como consecuencia del seísmo y en Filipinas se recomendó a los vecinos de algunas provincias costeras desplazarse a terrenos más elevados. En las primeras horas posteriores a la sacudida hubo una enorme preocupación por un posible tsunami, cuya alerta se activó, pero poco después fue levantada.
Los temblores sorprendieron a muchos camino del trabajo o del colegio. Hasta 60 personas quedaron atrapadas en un túnel al norte de Hualien y 17, entre ellas dos alemanes, en otro. «En este momento, lo más importante, la máxima prioridad, es rescatar a la gente», aseguró Lai Ching-te, que asumirá la presidencia de Taiwán en mayo.
No parece una tarea sencilla en vista del estado en el que han quedado algunos edificios, inclinados en ángulos casi imposibles -los servicios de emergencia tratan de sacar a quienes están dentro por las ventanas- y muchos hechos añicos.
El caos inicial en la isla dio paso a una actividad frenética para atender a los heridos (736, según el último recuento), intentar rescatar a los atrapados y restablecer servicios básicos. La mayoría de las líneas de metro pararon hasta comprobar los trazados y el enlace ferroviario con la zona más dañada que se restablecerá el jueves.
La compañía Taipower informó de que el servicio eléctrico se recuperó después del terremoto. Las dos centrales nucleares que operan en el país no se han visto afectadas, aunque algunas fábricas fueron evacuadas para garantizar la seguridad del personal.
De acuerdo a la eléctrica estatal Taipower, un total de 371.275 hogares se quedaron sin luz después del terremoto, aunque alrededor del 99 % ya ha recuperado el suministro eléctrico.