El mundo árabe pide "moderación" tras el ataque iraní a Israel y que no se olvide a Gaza
Los países árabes de Oriente Medio reaccionaron este domingo con preocupación a los ataques aéreos de Irán sobre Israel con un pedido unánime de "moderación máxima" ante la gran amenaza que la escalada supone para la región, y sin olvidarse de la situación en Gaza, causa última de toda esta crisis.
Ninguno de los países y organizaciones del entorno inmediato (Egipto, Arabia Saudí, Líbano, Catar, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Jordania, Consejo de Cooperación del Golfo) condenó explícitamente a Irán por el envío de cerca de 300 drones y misiles a Israel, en represalia por el bombardeo de su consulado en Damasco que dejó 13 personas muertas, entre ellos dos generales de la Guardia Revolucionaria iraní.
Ni siquiera los países más próximos a Israel de la región (EAU, Jordania) o los que mantienen peores relaciones con Teherán (Arabia Saudí o Egipto), apuntaron a Irán como responsable de una escalada, que vincularon a la "agresión" israelí en Gaza, cuyo fin es la única clave para garantizar la seguridad en la región.
Agresión contra Gaza
"Detener la agresión israelí contra Gaza y comenzar a implementar un plan integral para poner fin a la ocupación israelí y lograr una paz justa basada en la solución de dos Estados es la manera de detener la peligrosa escalada en la región", dijo el ministro de Exteriores jordano, Ayman al Safadi.
Al Safadi, sobre cuyo país sobrevolaron los misiles y drones iraníes camino de Israel y cuyas defensas aéreas colaboraron en la destrucción de los proyectiles, insistió sin embargo en que la ONU "asuma sus responsabilidades de proteger la seguridad y la paz" e imponga "un cese de la agresión contra Gaza y respetar el derecho internacional".
En un mensaje tanto dirigido a Irán como a Israel, el ministro jordano subrayó que su país "seguirá adoptando todas las medidas necesarias para proteger su seguridad y soberanía, y no permitirá que nadie exponga su seguridad o la de su pueblo a ningún peligro".
Catar, mediador clave en el conflicto en Oriente Medio y el país mas cercano a Teherán en la región después de Siria e Irak, expresó su "profunda preocupación" por el ataque iraní y pidió a las partes "máxima moderación" para frenar la escalada, al tiempo que pidió a la comunidad internacional a tomar "medidas urgentes para calmar la tensión".
Arabia Saudí usó la misma retórica: "profunda preocupación" por la escalada militar, pidió "máxima moderación" a las partes para evitar extender la guerra a la región e instó al Consejo de Seguridad de la ONU que "asuma su responsabilidad en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales".
Papel de la ONU
Emiratos, principal país árabe parte de los llamados Acuerdos de Abraham por los que reconoció a Israel y que mantiene una importante relación económica con el Estado judío, pidió poner fin a la escalada y "no tomar medidas que exacerben la tensión" para no poner a la región "arrastrada a nuevos niveles de inestabilidad".
Apeló también al Consejo de Seguridad de la ONU para que "cumpla con sus responsabilidades", para lo que tendrá que "resolver problemas y conflictos crónicos en la región que amenazan la seguridad y la estabilidad globales".
Varios países árabes de la región cuyas economías dependen en la exportación del petróleo o el gas, incluidos Catar, Omán y Arabia Saudí, también expresaron su "profunda preocupación" tras el ataque iraní.
El Líbano, en primera línea de fuego ante una posible guerra regional convocó una reunión de emergencia para mañana lunes de su Consejo de Ministros para abordar "estos momentos críticos", como anunció su primer ministro, Najib Mikati, pero no emitió condena ni comentario respecto a los ataques.
El secretario general del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) Jasem Mohamed Albudaiwi, organización que agrupa a todas las monarquías del golfo Pérsico, fue uno de los primeros en reaccionar tras el ataque iraní para marcar la línea general de pedir "máxima moderación" y evitar amenazas "a la estabilidad".
Desde El Cairo, cuyo gobierno mantiene relaciones con Israel desde 1973, el mensaje fue de "profunda preocupación" por "una peligrosa escalada entre los dos países".
"Egipto consideró que la peligrosa escalada que vive actualmente la arena iraní-israelí no es más que un resultado directo de lo que Egipto ha advertido repetidamente sobre los peligros de expansión del conflicto en la región como resultado de la guerra israelí en la Franja de Gaza y las provocativas acciones militares que se practican en la región", apuntó en una nota.
Omán, que mantiene buenas relaciones con Teherán, se limitó a advertir "de la gravedad de las repercusiones" de la escalada y recordó "la importancia de la autocontrol para salvar a la región y a su pueblo de los peligros de la guerra".