Al menos 63 personas fueron detenidas anoche en Tiflis durante una nueva jornada de protestas en el país contra la llamada "ley de agentes extranjeros", que se prolongó por cerca de seis horas y en la que también resultaron heridos seis policías.
"Los participantes en la protesta arrojaban a los agentes distintos objetos pesados, incluidas botellas y piedras", dijo en rueda de prensa el ministro del Interior georgiano, Alexandr Darajvelidze.
Según el ministro las fuerzas de seguridad tuvieron que utilizar medio especiales para dispersar la manifestación cuando esa cobró un "carácter violento". Entre los heridos durante la protesta se encuentra también uno de los líderes de la oposición georgiana, Leván Jabeishveli. Según la Policía, Jabeishveli, actualmente hospitalizado, intentó burlar un cordón policial en plena manifestación y opuso resistencia a los agentes del orden.
Los opositores denuncian que la ley promovida por el Gobierno es una copia de la normativa que se emplea en Rusia para acallar a la disidencia. Los manifestantes intentaron bloquear este martes la sede del legislativo, fuertemente custodiada por fuerzas antidisturbios, que recurrieron al empleo de gases lacrimógenos para dispersar a los opositores.
"¡No a la ley rusa!", "¡Georgia!", coreaban los congregados, que lanzaron huevos a los efectivos policiales. Las protestas en Georgia contra la "ley de transparencia de la influencia extranjera", que los parlamentarios ya aprobaron en primera lectura, comenzaron hace más de dos semanas. A la vez, este lunes los partidarios del Gobierno congregaron a decenas de miles de personas en la capital georgiana en apoyo a la política oficial.