El ministro de guerra Benny Gantz podría dimitir del gobierno hebreo
La salida del político supondría un auténtico varapalo para el Ejecutivo de Benjamin Netanyahu
El todavía ministro del gabinete de guerra de Israel, Benny Gantz, ha convocado a los medios hoy a las 20.40 hora local (17.40 GMT) previsiblemente para anunciar que se retira del gobierno de emergencia creado tras la guerra y del gabinete de guerra.
El anuncio oficial de su partido Unidad Nacional (centro-derecha) no aclara el motivo de la comparecencia pero la prensa israelí y analistas políticos dan por hecho que el político va a retirar su apoyo al Ejecutivo de emergencia creado por Netanyahu poco después de los ataques de Hamás del 7 de octubre para el manejo de la guerra.
Gantz, que antes del 7 de octubre estaba en el bando de la oposición, fue el único líder que accedió a la petición de Netanyahu de formar un gobierno de unidad nacional en tiempos de guerra y logró un puesto dentro del gabinete de guerra más reducido, donde es uno de los tres integrantes con derecho a voto, junto con el propio primer ministro y el titular de Defensa, Yoav Gallant.
Gantz, que en el pasado fue jefe del Estado Mayor y ministro de Defensa, lanzó a mediados de mayo un ultimátum a Netanyahu: abandonaría el gabinete si no anunciaba un plan de postguerra para la Franja de Gaza antes del 8 de junio, algo que no ha ocurrido.
El exministro, como otras figuras del estamento militar y expertos, así como EEUU, creen fundamental definir cuánto antes quien asumiría las tareas civiles y de gobierno en la Franja cuando acabe la guerra, una vez que Hamás haya sido derrotado.
La prensa hebrea publicó ayer que Netanyahu y Gantz mantuvieron una reunión la noche del miércoles, sin acuerdos, y en estos momentos tampoco hay contactos entre sus respectivos partidos Likud y Unidad Nacional.
La emisora pública israelí Kan informó de que el gobierno estadounidense ha intentado convencer a Gantz de retrasar su salida prevista en medio de los esfuerzos en curso para alcanzar un alto el fuego y un acuerdo de rehenes con Hamás en Gaza.
La salida del partido de Gantz del gobierno de emergencia no pone todavía en peligro la supervivencia de la coalición de Netanyahu, la más derechista de la historia de Israel, que mantiene los 64 escaños en el Parlamento, como antes de la guerra.
Sin embargo, el perfil político de Gantz se reforzó mucho durante la guerra y aún lidera las encuestas electorales -aunque se ha desinflado en las últimas semanas- y su renuncia es un varapalo simbólico para Netanyahu, a pesar de que los números todavía están de su lado.
La coalición de gobierno corre otros peligros: los partidos de ultraderecha -Poder Judío y Sionismo Religioso- han amenazado con abandonarlo si se firma el acuerdo de tregua con Hamás.
Político opositor
Israel ya controla todo el ‘corredor Filadelfia’, como denomina a los 14 kilómetros de frontera entre la Franja de Gaza y Egipto, después de que sus tropas hayan llegado hasta la costa mediterránea, mientras avanza en el interior de Rafah y endurece su ofensiva en los campos de refugiados del centro del enclave.
El Ejército israelí ya anunció la semana pasada que ya tenía el «control operativo» de la divisoria, a la espera de alcanzar una pequeña sección próxima a la costa, aunque controlaban el área con vigilancia y potencia de fuego. Sus tanques llegaron hoy a la zona de Al Izba, extremo suroeste de Rafah frente al Mediterráneo, confirmaron residentes a EFE y como refleja además una foto viral que circula en medios y redes palestinas.
Para Israel, controlar esa frontera es muy importante porque es la principal fuente de contrabando de armas que durante años ha servido para la entrada de armamento de Hamás.
Además, residentes en Rafah confirmaron que los tanques israelíes han avanzado hacia el oeste en el interior de la ciudad, ubicada en esta frontera, donde han realizado hoy varias incursiones desde el corredor Filadelfia. Los blindados israelíes se aproximan ahora al occidental barrio saudí de Rafah desde la zona de Tal al Sultan.