Vladimir Putin y Kim Jong Un sellan un acuerdo de asociación estratégica
El presidente ruso pide revisar el «régimen restrictivo» de sanciones impuestas contra Corea del Norte
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el líder norcoreano, Kim Jong Un, han firmado este miércoles un acuerdo de «asociación estratégica» con una cláusula de defensa mutua en caso de agresión, un pacto alcanzado en el marco de la visita del mandatario ruso al país, la primera en 24 años.
Tras una serie de negociaciones que se han alargado durante aproximadamente dos horas, los líderes de ambos países, reunidos junto a sus respectivas delegaciones en el Palacio del Sol de Kumsusan, han dado el visto bueno a un acuerdo que supone una constatación del reciente acercamiento entre las partes.
Putin ha confirmado así que este documento ofrece ahora la posibilidad de poner en marcha mecanismos de «asistencia mutua ante posibles agresiones contra cualquiera de las partes firmantes», tal y como ha explicado en una rueda de prensa tras el encuentro. En este sentido, ha hecho alusión a las últimas declaraciones realizadas por líderes de países miembro de la OTAN sobre la posibilidad de entregar armas a Ucrania y avalar el uso de las mismas para atacar objetivos en territorio ruso.
«Esto no es solo una declaración, esto está pasando y es una clara violación de las restricciones asumidas por los países occidentales en el marco de sus obligaciones internacionales», ha aseverado Putin, según ha recogido la agencia Interfax. Además, el mandatario ruso no ha descartado la idea de cooperar para desarrollar la industria tecnológica y militar de estos dos países.
Este documento reemplaza al Tratado de Asistencia Mutua de 1961, el Tratado de Amistad y Buena Vecindad del 2000 y las declaraciones posteriores firmadas en 2000 y 2001, según ha explicado el asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, a la agencia rusa de noticias TASS.
Putin ha instado, a su vez, a «revisar» el régimen de sanciones impuesto por la ONU contra Corea del Norte. «Quiero señalar que el régimen restrictivo indefinido del Consejo de Seguridad de la ONU con respecto a Corea del Norte, inspirado por Estados Unidos y sus aliados, debe ser revisado», ha puntualizado antes de mostrarse dispuesto a tomar medidas para «eliminar la amenaza de conflicto» existente en la península de Corea.
«Rusia está dispuesta a seguir realizando esfuerzos políticos y diplomáticos para eliminar la amenaza de una reanudación del conflicto armado en la península de Corea», ha manifestado.
Además, ha acusado a Estados Unidos y Corea del Sur de provocar un aumento de la tensión mediante la puesta en macha de maniobras militares conjuntas, una política con la que buscan «aumentar la intensidad de las maniobras militares» en la zona. Por su parte, el líder norcoreano ha indicado que el tratado firmado este miércoles es únicamente de carácter «defensivo» y no existe nada que temer. «Este poderoso tratado representa (...) nada más que un documento de carácter verdaderamente constructivo», ha recalcado Kim.