Israel ataca en tres frentes con una agresión a gran escala contra Yemen
Los hutíes habían reivindicado el lanzamiento de un misil balístico contra el aeropuerto
El Ejército israelí anunció que ha lanzado este domingo una operación a «gran escala» contra los rebeldes hutíes en la ciudad portuaria de Al Hodeida, en el oeste del Yemen, un día después de que los insurgentes chiíes reivindicaran el lanzamiento de un misil balístico contra el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv.
La agencia de noticias Saba, de los hutíes, informó escuetamente de que «la agresión israelí tiene como objetivo la ciudad de Al Hodeida», concretamente contra los puertos de Al Hodeida y Ras Issa, de los más importantes en el Yemen, así como dos plantas eléctricas.
El Ejército israelí afirmó en un comunicado que «decenas de aviones de las fuerzas aéreas, incluidos cazas y aviones de reabastecimiento e inteligencia, atacaron objetivos militares del régimen terrorista hutí en las zonas de Ras Issa y Al Hodeida en el Yemen», donde tuvieron como blanco «centrales eléctricas y puerto marítimo, usado para importar petróleo». «A través de las infraestructuras y puertos atacados, el régimen hutí transfiere armas iraníes a la región y suministros para necesidades militares, y por tanto, también petróleo. El ataque se llevó a cabo en respuesta a los últimos ataques perpetrados por los hutíes contra el Estado de Israel», según el Ejército israelí.
Apuntó que los rebeldes han estado operando «bajo la dirección y financiación de Irán y en cooperación con las milicias iraquíes, para perjudicar al Estado de Israel, socavar el orden regional y perturbar la libertad de navegación mundial».
El Ejército israelí está «decidido a seguir actuando y dañando a todo aquel que suponga una amenaza para los ciudadanos de Israel y a la distancia que sea necesaria», dado que el Yemen se encuentra a unos 1.800 kilómetros de Israel. Este sábado, los hutíes reivindicaron el lanzamiento de un misil balístico contra el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv «durante la llegada del criminal Benjamín Netanyahu», primer ministro de Israel.
La tensión se ha incrementado en Oriente Medio tras el asesinato el pasado viernes del líder de Hizbulá, Hasán Nasrala, en un bombardeo masivo israelí en los suburbios sur de Beirut. No es la primera vez que Israel ataca el Yemen, ya que el pasado julio lanzó también una acción contra el puerto de Al Hodeida que mató al menos a seis civiles, alcanzó a más de dos decenas de tanques de almacenamiento de petróleo, así como una central eléctrica.
Los hutíes atacan desde el pasado noviembre barcos vinculados a Israel en el mar Rojo, así como lanzando proyectiles contra Israel, algunos de los cuales han logrado impactar.
En El Líbano, al menos 24 personas murieron y otras 29 resultaron heridas este domingo en un bombardeo de la aviación israelí dirigido contra la localidad de Ain al Delb. De acuerdo con el departamento, se trata del «recuento inicial» de víctimas en este ataque contra la localidad, ubicada a escasos kilómetros al oeste de la ciudad costera de Sidón, desde donde miles de personas han abandonado sus hogares en los últimos días para buscar refugio en zonas más seguras.
Israel continuó este domingo con su intensa campaña de bombardeos iniciada hace una semana contra los principales bastiones de Hizbulá en el sur y el este del Líbano, pero también en los suburbios sur de Beirut y en otras áreas más al norte de la capital que hasta recientemente no habían sido un blanco de los ataques israelíes.
En el Valle de la Bekaa, en el este del país mediterráneo, las autoridades libanesas informaron de la muerte de otras cuatro personas. Tan solo en la jornada anterior, al menos 33 personas murieron en diferentes ataques, mientras que en poco más de una semana más de mil personas han muerto y otras 6.000 han resultado heridas por estos bombardeos, según el Gobierno libanés.
Alrededor de un millón de personas han abandonado sus hogares en los últimos días en el Líbano debido a la campaña de ataques, anunció este domingo el primer ministro libanés, Najib Mikati, que recordó que su Gobierno lleva pidiendo una tregua en Gaza y en el Líbano desde hace «siete u ocho meses».