Beirut, conmocionada por los bombardeos que sacuden la capital
La aviación israelí ha causado nueve muertos y 14 heridos en el ataque a un edificio de Al-Bashura
Beirut se encuentra bajo la conmoción de los bombardeos israelíes, que este jueves causaron nueve muertos y catorce heridos en el centro de la capital libanesa. Esta es la segunda ocasión en la que el Ejército hebreo ataca en el interior de la ciudad, aunque sus habitantes se están familiarizando con el estruendo de las explosiones y el temblor del suelo después de que en dos semanas la aviación haya dejado caer sus misiles una decena de veces en el distrito de Dahiye, donde sitúan el bastión de Hezbolá El ataque, realizado todavía de noche, provocó grandes daños en un edificio de la zona de Al-Bashura que, según la Agencia Nacional de Noticias, albergaba un centro de la Autoridad Sanitaria Islámica. La explosión barrió varias plantas. La mayoría de las víctimas son paramédicos y otros miembros de los servicios de rescate. Los cuerpos de varios de ellos salieron despedidos a la calle.
Israel informó posteriormente que avisó del ataque antes de que se produjera y que se trató de una «operación selectiva» contra un bloque de apartamentos donde supuestamente había una célula de Inteligencia de la milicia. La acción armada habría matado a varios agentes y destruido información y material de la principal base de espionaje de Hezbolá en Beirut, según esta versión.
El pasado lunes, el Ejército también destruyó una planta de un inmueble del barrio de Cola donde señaló que se escondían tres miembros del Frente Popular para la Liberación Palestina. Medios libaneses descartaron la vinculación del centro de la Autoridad Sanitaria, afiliada a Hezbolá , con actividades terroristas.
Numerosos beirutíes siguen en estado de shock. El edificio se encuentra en el corazón de la ciudad, pero además el Ejército israelí arriesgó mucho en este bombardeo. Ellugarb se encuentra a pocos metros del Parlamento libanés, la oficina del primer ministro y otras sedes del Gobierno. En las calles adyacentes hay varias sedes diplomáticas, además de comercios y oficinas de la Administración. Los empleados locales fueron enviados a sus casas y las clases permanecen suspendidas. «Nadie está tranquilo. Sabemos que los aviones israelíes, voluntariamente o por un error táctico, pueden dejar caer sus bombas sobre nosotros», explica un vecino del centro a un medio local. La explosión fue de tal calibre, que miles de personas salieron a las ventanas o se echaron a la calle angustiadas en todos los puntos de Beirut. Ambulancias y bomberos se concentraron en Al-Bashura. En un pequeño cementerio próximo, los equipos recogieron los restos de varias víctimas arrojadas por el impacto a decenas de metros. El terror se ha incrementado además con el paso de las horas, al tomar forma la posibilidad de que Israel hubiera utilizado bombas de fósforo.