Autorizan que aviones espía sobrevuelen el país iraquí
Estados Unidos advierte de que el veto europeo en la Otan no frenará la guerra
Irak tiene hasta el viernes para torcer la voluntad de EEUU para declararle la guerra, según advirtió el domingo el secretario de Estado estadounidense, Colin Powell. La suerte iraquí depend
«Según lo que hemos visto en los últimos meses, creo que será hora de que el Consejo de Seguridad comience a considerar una resolución que declare a Irak en ruptura material (de sus obligaciones), y será hora de que enfrente las consecuencias más serias que sigan», añadió. Horas después de que Powell hiciera estas declaraciones, Irak aceptó incondicionalmente el sobrevuelo de aviones espías estadounidenses. Sin referirse específicamente a ese movimiento del Gobierno de Sadam Husein, el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, señaló ayer que «un poco aquí y un poco allí no le va a servir. Esto es sobre el desarme, y le queda poco tiempo para hacerlo». Irak deja pasar los U-2 Era la única cuestión relevante, entre todas las que los jefes de inspectores querían dejar zanjadas antes del informe que presentarán el viernes ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que había quedado sin resolver. Pero las autoridades iraquíes han reaccionado con rapidez. Los polémicos vuelos de los aviones espías estadounidenses U-2 podrán llevarse a cabo, tal y como venía exigiendo la ONU, sin peligro de ser perturbados o interrumpidos de raíz por el fuego de las baterías antiaéreas del Ejército iraquí. Hasta ahora, Bagdad había condicionado esa autorización a que EEUU y el Reino Unido pusieran fin a los ataques de sus aviones de combate en las zonas de exclusión aérea. El cumplimiento previo de esa condición, ni el de ninguna otra, es ahora necesario. Las autoridades iraquíes ni siquiera han exigido un compromiso verbal de EEUU o el Reino Unido de que detendrán los bombardeos. Hoy, lunes, por ejemplo, una nueva incursión aérea cerca de Basora provocó, según fuentes iraquíes, dos muertos y nueve heridos. El primero en dar a conocer la nueva concesión de Sadam Husein a la ONU fue el embajador iraquí ante esa organización internacional, Mohamed Al Duri, quien dijo ayer que «estamos intentado evitar la guerra a cualquier precio». El anuncio fue hecho poco después de que el director de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Mohamed Al Baradei, animase a Irak a dar muestras de su nueva actitud urgentemente, «en los próximos días».