La mayoría de los ciudadanos israelíes ya han acudido a los centros de distribución de máscaras antigás
Israel aísla a millones de palestinos mientras se prepara para la guerra
Más de tres millones y medio de palestinos han quedado encerrados por el ejército de Israel en Cisjordania y la Franja de Gaza, mientras el g
La habitación debe ser la que tenga el menor número de ventanas de la casa y las más pequeñas, se ha de sellar con plásticos y cinta aislante y colocar una toalla humedecida con agua y bicarbonato en la parte baja de la puerta en cuanto suene la sirena de aviso que pondrá en marcha el llamado «Mando de Retaguardia» que pertenece al Ejército. Los avisos se difundirán por los medios de comunicación en hebreo, inglés, ruso, amarit (etíope) y por primera vez en español. Los ciudadanos deben almacenar en el cuarto una linterna, una radio para seguir las indicaciones del «Mando de Retaguardia», teléfonos móviles con cargador, un ventilador eléctrico y un balde. Se aconseja también no usar aire acondicionado, que cada persona porte un bolso personal con sus documentos, la lista de qué vacunas ha recibido, mudas de ropa y también abrigos por si se tiene que desalojar rápidamente la vivienda. En cuanto a la comida, se sugiere latas de conserva, sopas instantáneas y doce litros de agua por persona. Los ciudadanos extranjeros pueden acudir a los centros de distribución y, previo depósito de poco más de 42 dólares, recibirán una máscara antigás y deberán seguir las mismas instrucciones que los israelíes. Como contrapartida, fuentes palestinas ya han denunciado que en los territorios de Gaza y Cisjordania, igualmente vulnerables que Israel en caso de ataque iraquí, ni un sólo organismo se ha encargado de aconsejar a la población civil en caso de guerra. Además el ministro de Defensa israelí, Shaúl Mofaz, decidió el pasado lunes cerrar a cal y canto Gaza y Cisjordania, al menos hasta el próximo viernes, ante las sospechas de que activistas de las facciones armadas palestinas puedan perpetrar un atentado contra objetivos israelíes. Ningún palestino puede salir de los territorios hasta nuevo aviso y muchos temen que el cierre total de los territorios se prolongue durante meses, tal y como ocurrió en la guerra de 1991.