LAS INAMOVIBLES POSTURAS EN EL CONSEJO DE SEGUIRIDAD

Francia. El ministro francés de Exteriores, Dominique de Villepin, dejó claro en el Consejo de Seguridad de la ONU que su Gobierno no aceptará dar un ultimátum al régimen de Bagdad para que se desarme, porque «un ultimátum de pocos días sería sólo un pretexto para la guerra». En una intervención que prestó gran importancia a advertir de los peligros de una guerra, abogó por reforzar el trabajo de los inspectores, puesto que «el método elegido funciona», como demuestra la destrucción de misiles Al Samud II iniciada por Bagdad. España. La ministra de Exteriores de España, Ana Palacio, aseguró ayer ante el Consejo de Seguridad que «buscar componendas» sobre Irak sólo perjudicará la paz y la estabilidad internacional. La ministra resaltó que sólo «la máxima presión y la amenaza creíble al recurso de la fuerza hacen mella en el régimen iraquí». Rusia. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Igor Ivanov, afirmó ante el Consejo de Seguridad de la ONU que no es necesaria una nueva resolución y abogó por un refuerzo y del programa de inspecciones en Bagdad. Ivanov señaló que Rusia cree en la posibilidad de desarmar a Irak y por ello, explicó que «no necesitamos nuevas resoluciones, pero sí un apoyo incondicional activo de las inspecciones». El jefe de la diplomacia rusa indicó en su intervención que se ha avanzado en el campo de las inspecciones y que se han registrado «cambios cualitativos» en la actitud de Bagdad. Asimismo, declaró que hoy nos encontramos ante «un verdadero desarme». China. El ministro chino de Asuntos Exteriores, Tang Jiaxuan, reiteró en la ONU la oposición de su país a la aprobación de una segunda resolución sobre Irak, asegurando que el régimen de Sadam Husein ha «avanzado» en la aplicación de las resoluciones sobre desarme, e instando al Consejo a «no cerrar las puertas de la paz». «No hay razón alguna para cerrar las puertas a la paz y no estamos a favor de una nueva resolución, especialmente una que autorice el uso de la fuerza», insistió Tang durante su intervención. «China llama al Consejo de Seguridad a que actúe de acuerdo con sus deberes y responsabilidades para evitar la guerra y a mantener sus esfuerzos por alcanzar una solución política», apuntó. Alemania. El ministro de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, consideró que, «en la actual situación», no es necesaria una segunda resolución sobre Irak y se debe seguir por las vías creadas por la 1441 para conseguir el desarme pacífico de este país, ya que los informes de los inspectores han revelado que la cooperación de Bagdad «ha mejorado mucho en los últimos días». Según declaró ante el Consejo de Seguridad, no hay necesidad para «abandonar el camino que estábamos siguiendo, ya que los inspectores, en aplicación de la resolución 1441, han conseguido resultados».