Blix denuncia que EE. UU. falseó pruebas para ir a la guerra en Irak

«Estados Unidos estaba muy ansioso por conseguir votos en el Consejo de Seguridad y pensó que informaciones sobre esas cosas podían ser útiles, así que las filtraron». Pero, según Blix, esas filtraciones se basan en una información que no es cierta. Los informes incluían referencias a un supuesto contrato entre Irak y Níger para la compra de 500 toneladas de uranio. «La Agencia Internacional para la Energía Atómica se hizo con el contrato y no tuvo dificultades para mostrar que era un contrato falsificado». Hans Blix, jefe de inspectores de la ONU, quiere que sus hombres regresen a Irak. Así lo expresó ayer ante el Consejo de Seguridad, donde defendió la necesidad de que un equipo de reconocida independencia internacional obtenga el visto bueno de la organización para viajar a Irak en dos semanas y buscar las armas de destrucción masiva que aún nadie ha encontrado y en cuya supuesta existencia se respaldó Bush para atacar a Irak. El jefe de inspectores aprovechó para suavizar sus declaraciones previas, hechas a la BBC, en las que había expresado su "gran preocupación por la presentación de pruebas falsas que hizo la inteligencia de Estados Unidos y Gran Bretaña para justificar su decisión de atacar a Irak". Blix desmintió haber criticado a ningún servicio de inteligencia nacional y dijo haber hablado sólo de «la debilidad de las pruebas presentadas». Estados Unidos abortó las inspecciones de la ONU en Irak cuando decidió atacar militarmente a Sadam Huseín. Una vez finalizada la guerra, la coalición que lideran los norteamericanos ha puesto a trabajar a sus propios equipos de investigación y ha ignorado las peticiones de Blix para que sus inspectores regresen, a pesar de que según el Washington Post, los militares están perdiendo la esperanza de encontrar algo puesto que hay mucha información clave que ha desaparecido tras los saqueos de Bagdag. No obstante, no cesarán en su empeño. Mientras, Francia parece querer enterrar el hacha de guerra contra Estados Unidos con respecto a Irak. Ayer, en una inesperada decisión, el Gobierno de Jacques Chirac propuso que se levanten inmediatamente las sanciones impuestas por Naciones Unidas contra el país árabe. Esto representa un nuevo punto a favor del presidente de Estados Unidos, George Bush.