Aznar viaja hasta Londres para negociar con Blair el futuro de Irak y los contratos de reconstrucción del país
«Francia pagará»
Francia será castigada por haberse opuesto a la guerra en Irak. Estados Unidos ya está estudiando cuales pueden ser las represalias co
«No pudimos reunir los votos (en el Consejo de Seguridad) y pienso que se debe a un veto cierto de Francia y probable de Rusia. La guerra ya terminó y ahora tenemos que revisar nuestras relaciones a la luz de estos acontecimientos», advirtió Powell. El secretario de Estado no precisó el tipo de represalias que su país tomará contra los galos. Sin embargo, desde hace dos semanas un equipo de asesores de Bush, dirigidos por el principal defensor de las represalias contra Francia, el vicepresidente Dick Cheney, trabajan para encontrar un consenso respecto al tipo de medidas que el gobierno estadounidense tomará. Según se supo ayer, la primera reunión fue abortada por Francia al enterarse de los planes norteamericanos pero hubo un segundo encuentro el pasado lunes, al que asistieron representantes de los departamentos de Seguridad, Defensa y Estado. La reunión finalizó sin acuerdo concreto aunque la próxima semana podría alcanzarse una decisión. Sin embargo, entre las posibles medidas que la administración Bush está estudiando destacarían minimizar el poder de decisión de París en la Otan, según informaba ayer la agencia AFP. «Están intentando encontrar mecanismos alternativos para trabajar con o sin Francia pero no sólo en la Otan sino en espectros más amplios», declaró un funcionario del Gobierno. Eliminar el poder de decisión del Consejo del Atlántico Norte en favor del Comité de Planes de Defensa, del que Francia no forma parte, sería la primera medida a considerar. Además Cheney planea desterrar a Francia de las reuniones que a menudo se mantienen con aliados europeos respecto a diferentes materias de carácter internacional. «Se está buscando disminuir las consultas con Francia a niveles ministeriales», explicó la misma fuente. El portavoz Ari Fleisher reiteró ayer que las relaciones con Francia «son problemáticas» y que hay que «hacer algo» respecto a su «comportamiento» ante la guerra. La amenaza estadounidense de represalias, ambiguas e imprecisas, fue respondida ayer por el ministro galo Villepin desde Ankara, primera etapa de una gira por Oriente Próximo que concluye hoy en Teherán. «Francia, con una amplia mayoría de la comunidad internacional, ha actuado a lo largo de la crisis iraquí conforme a sus convicciones y a sus principios para defender la legalidad internacional. Y continuará haciéndolo en toda circunstancia», proclamó el hidalgo galo de la paz. Y en París, el portavoz del Gobierno, Jean François Coppé, declaró que el peaje anunciado por Powell «no se corresponde absolutamente en nada a la realidad de nuestras relaciones actuales con los Estados Unidos, como ha testimoniado recientemente la conversación telefónica entre los presidentes Chirac y Bush». Esa llamada desde el Elíseo rompió el martes de la semana pasada más de dos meses de incomunicación entre ambos mandatarios y fue calificada por la Casa Blanca de «profesional», vocablo que en lenguaje diplomático significa «glacial». Con la pax americana semiinstalada en Bagdad, París ha dejado de hablar de «intervención ilegal» para, en nombre del pragmatismo, intentar recomponer los platos rotos con algún contrato petrolero y una participación en la reconstrucción de Irak. Mientras, el presidente del Gobierno español, José María Aznar, llegó ayer a Londres para analizar con el primer ministro británico, Tony Blair, la situación en Irak y para negociar los contratos de reconstrucción. El jefe del Ejecutivo español se trasladó directamente al 10 de Downing Street, sede del Gobierno británico, para reunirse con Blair. Además del proceso de reconstrucción de Irak, el papel que debe desempeñar Naciones Unidas en el mismo y la necesidad de que israelíes y palestinos reanuden sus conversaciones de paz formaron parte de la agenda de la entrevista. Tras ella, Aznar y Blair cenaron y vieron juntos por televisión el partido fútbol de cuartos de final de la Liga de Campeones entre el Manchester United y el Real Madrid.