OPINIÓN Antonio Papell
Futuro a cuatro
La reunión a cuatro que ayer celebraron los jefes de Estado o de Gobierno de Francia, Alemania, Bélgica y Luxemburgo para sentar las bases de una nueva Europa de la Defensa -intento fallido numerosas veces en el pasado- introduce un nuevo y preocupante factor de división en el seno de la Unión Europea, dado que de momento quedan excluidos de esta iniciativa países como el Reino Unido -sin cuyo concurso la idea de una defensa propiamente europea no tiene sentido-, Italia o España. Aunque la idea de una Europa autosuficiente en materia de Defensa no es agresiva, de las declaraciones de las partes, que han tratado de aparentar moderación, se desprende que, tras dicha iniciativa franco-alemana, se esconde la visión multipolar del mundo que es explícitamente rechazada por Londres y por Washington. Para éstos, la hegemonía norteamericana es un hecho que, en cierto sentido, legitima el unilateralismo, es decir, la arbitrariedad al margen de cualquier noción de Derecho Internacional. La conciliación de ambas posturas no llegará, evidentemente, de insistir en la confrontación sino de activar el diálogo trasatlántico. Sucede sin embargo que las heridas abiertas por el conflicto de Irak no han cicatrizado, por lo que el debate es por ahora imposible.