El PSOE exige que no se apoye una reconstrucción sin la ONU

Según los socialistas, ese vacío legal convierte a las potencias vencedoras en «ocupantes», no en administradoras, y por lo tanto están fuera del derecho internacional. «Una potencia no es administradora hasta que tiene un mandato específico de las Naciones Unidas». Esta máxima del derecho internacional, expresada por el portavoz de Exteriores del PSOE, Manuel Marín, resumió la petición que ayer hizo el primer partido de la oposición al Ejecutivo para que busque el aval y la dirección de la ONU en la reconstrucción de Irak, porque si no los funcionarios españoles que participen en ella quedarán en una situación de «ilegalidad». En una sesión de control que sonó a más de lo mismo, la jefa de la diplomacia, Ana Palacio, se limitó a replicar que «en ningún momento se ha roto la legalidad internacional» y a acusar a los socialistas de «demagogos, electoralistas». Según la ministra, el primer partido de la oposición ataca al Gobierno porque «le irrita profundamente» la sintonía del jefe del Ejecutivo con el primer ministro británico y «socialista», Tony Blair, y adolece de «antiamericanismo». Por su parte, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, sostuvo que el Ejecutivo habría vulnerado la Constitución al «comprometer a España en una guerra» sin el permiso del Parlamento ni la firma del Rey». Por lo que IU ha pedido el amparo del Constitucional, para que una resolución del máximo órgano intérprete de la Carta Magna obligue al Gobierno a ordenar, entre otras cosas, el regreso de los militares españoles desplegados en el puerto iraquí de Um Qasar y a desautorizar el uso de las bases de Rota y Morón por el Ejército de Estados Unidos. El recurso fue llevado a la sede de la corte por el propio Llamazares en nombre de los ocho diputados que integran el grupo parlamentario de su partido, y está abierto a la adscripción de otros grupos.