Bush divide Irak en tres zonas bajo control británico, polaco y americano

Estados Unidos, Gran Bretaña y Polonia fueron, junto a Australia, los países que aportaron tropas a la intervención militar contra Irak. Durante la reunión celebrada la pasada semana en Londres para formar la fuerza de estabilización, España, Italia, Ucrania, Dinamarca, Bulgaria y Holanda ofrecieron participar en las operaciones de estabilización con tropas especializadas en patrullar zonas conflictivas. Hasta el momento no se ha determinado el número de tropas ni las operaciones que llevarán a cabo, pero sí se sabe ya que esos tres sectores en los que quedará dividido Irak no se configurarán sobre una base geográfica. Cada sector será patrullado por una fuerza de unos 20.000 soldados, equivalente a una división estadounidense. La ONU quedará relegada a operaciones de ayuda a la población. Además de llevar a cabo tareas de policía militar y de ingeniería, las tropas integrantes de la nueva fuerza de ocupación incluirían a especialistas en reconocimiento y asuntos civiles, así como expertos en armas químicas, biológicas y nucleares. Por su parte, el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, exigió ayer en Siria y Líbano neutralizar al brazo armado del grupo chií libanés Partido de Dios (Hizbulá) y a varios grupos extremistas palestinos con el fin de acelerar la aplicación del plan de paz para Oriente Medio conocido como «Hoja de Ruta». En una conferencia de prensa en Beirut antes de concluir una visita en Siria y Líbano, Powell afirmó que las autoridades sirias le aseguraron que han cerrado algunas oficinas en Damasco de grupos antiisraelíes. «Se comprometieron a cooperar y esperamos que continúen haciéndolo», dijo el jefe de la diplomacia de EE. UU. tras reunirse con el presidente libanés, Emile Lahud, a las pocas horas de haberse visto en Damasco con el sirio, Bachar al Asad. Powell señaló que había analizado con los dos líderes árabes la situación en la zona tras el derrocamiento en Irak de Sadam Huseín, y dijo que trató con Asad «muchos asuntos, incluida la continuidad del cierre de la frontera con Irak y el asunto de las armas» de destrucción masiva. Varios responsables estadounidenses han acusado en las últimas semanas a Siria de esconder armas iraquíes de destrucción masiva, acoger dirigentes del régimen depuesto y suministrarle material militar durante la guerra en Irak. «Deseamos establecer una atmósfera de paz en la región y alcanzar una solución global que respete los intereses de Siria y Líbano», afirmó Powell. Powell también exigió que el Ejército libanés se despliegue en la frontera con Israel, en lugar de la guerrilla de Hizbulá. Este grupo, considerado por Washington una organización terrorista, lideró la resistencia contra Israel en el sur de Líbano.