Israel obliga a firmar un papel que exime de las muertes al ejército
Israel ha prohibido desde ayer la entrada en la franja de Gaza de los pacifistas internacionales al tiempo que obliga a todos los extranjeros que quieran entrar allí a firmar un documento eximiendo al ejército de la muerte o de las heridas que puedan sufrir durante su estancia. Se trata de una medida dirigida principalmente contra el Movimiento de Solidaridad Internacional (MSI), una organización que defiende la no violencia y cuyos miembros -que básicamente son estudiantes occidentales- combaten por medios pacíficos los excesos que los soldados cometen con los palestinas. La ofensiva contra el MSI se concretó este viernes en una operación del Ejército israelí en la sede del grupo en Beit Sahur, junto a Belén. Los soldados se incautaron de ordenadores, discos duros y otro material que estaba dentro de la oficina y detuvieron a tres de sus miembros, dos de ellos extranjeros. «El Ejército de Israel pretende expulsar a todos los voluntarios internacionales de los territorios palestinos porque no quiere que haya testigos de sus acciones», dijo Gasan Andoni, un miembro del MSI en Beit Sahur. Israel, por su parte, justifica estas acciones afirmando que los dos británicos de origen paquistaní que la semana pasada cometieron un atentado suicida en Tel Aviv se reunieron con miembros del MSI pocos días antes del atentado. El MSI reconoce la existencia de la reunión pero afirma que fue un contacto que sólo duró algunos minutos y que en ningún momento se traslució que los dos británicos estuvieran preparando un atentado.