El Gobierno español cifra en 35.786 millones de euros la reconstrucción de Irak hasta el 2005

La reconstrucción de Irak ya tiene cifras. Según un informe elaborado en España por la Secretaría de Estado de Comercio, que dirige Juan Costa, en los dos próximos años se necesitarían 35.786 millones de euros, incluidos los gastos anuales de la Administración pública iraquí, situados en 10.820 millones de dólares. Costa, que aseguró que el coste de la reconstrucción se elevaría al menos a 65.186 millones de euros en los próximos diez años, precisó que será necesaria la ayuda internacional, ya que el petróleo iraquí no será suficiente. Según el estudio, sólo para financiar las necesidades urgentes de carácter sanitario y equipamiento médico se deberán destinar 1.048 millones de dólares para alcanzar el nivel de dos camas por cada 1.000 habitantes, mientras que la construcción de 125.000 nuevas viviendas durante los dos próximos años precisará 2.300 millones de dólares, a los que hay que sumar 1.500 millones más para construir edificios públicos. El Gobierno español estima que recomponer el suministro de energía eléctrica supondrá una inversión de 1.188 millones de dólares y la construcción de plantas de tratamiento de agua potable y la mejora de la red de distribución significarán, al menos, 912 millones de dólares más. La relación de gastos no tiene fin. Impulsar la agricultura y la ganadería precisará 1.688 millones de dólares, mientras que las infraestructuras educativas se llevarán 1.300 millones; el transporte, 2.120 y la industria petroquímica, 3.500. Capítulo aparte son las infraestructuras viarias. La construcción y repavimentación de nuevas carreteras (se calcula que 1.000 kilómetros de carreteras y 200 kilómetros de vías férreas están dañadas), así como la puesta en marcha de las instalaciones portuarias supondrán un coste de 2.120 millones de dólares. Mientras, sobre el terreno, el horror no cesa. Los cuerpos de 15.000 personas asesinadas por el régimen derrocado de Sadam Huseín han sido encontrados en una fosa común en la ciudad de Babilonia. Además, los médicos temen que cientos de iraquíes sufran contaminación radiactiva debido a los saqueos perpetrados en varias instalaciones nucleares desde que finalizó la guerra en Irak, según informa el diario británico The Daily Telegraph en su edición digital. Entre los objetos robados se cree que hay documentos técnicos, equipos de detección y barriles con material radiactivo. Muchos vecinos de las aldeas próximas a la central nuclear Tuwaitha, a unos 10 kilómetros al sur de Bagdad, mostraron el pasado fin de semana síntomas de tener enfermedades radiactivas, como sarpullidos, vómitos y fuertes hemorragias nasales. Tras la caída del régimen de Sadam Husein, muchos aldeanos comenzaron a saquear barriles que contenían óxido de uranio, que vaciaron para usarlos como depósitos de agua, de leche o de yogurt.