Kirchner, que hará público su gabinete el lunes, vivió su primera jornada como presidente de Argentina
Menem se va a Chile un día después de renunciar a la segunda vuelta
El día después de la estrepitosa decisión de Carlos Menem de abortar la segunda vuelta electoral para dejar a Néstor Kirchner consagrado como
En el viaje sólo le acompañaron su amigo y vocero Alberto Cohan y su sobrino, el diputado Adrián Menem. Quienes lograron verlo aseguraban que llevaba el abatimiento en su rostro; y con seguridad, en su maleta, llevaba su propio cadáver político. Las treinta y seis horas de incertidumbre que el ex presidente «regaló» a los argentinos mientras meditaba su decisión, provocando un hecho inédito en el mundo de las democracias, han sido el tiro de gracia para un político que acabó derrotado por sus propias trampas. Él, junto a Raúl Alfonsín, manipularon la Constitución argentina en 1994 para asegurarse la supervivencia en el poder y ahora esa maquiavélica trama resultó ser su propia tumba política.Menem intentó justificar su ridícula actitud asegurando que «en el arte de la conducción política los tres estamentos fundamentales son la información, el secreto y la sorpresa», y para estupor de millones de compatriotas agregó «no abandonaré la actividad política porque ha sido y es la razón de mi vida». En realidad la única alternativa pública que le queda es ocupar el puesto de senador suplente por su provincia, haciendo renunciar a la hermana del actual gobernador que ya le ofreció su sitio. Pero si Menem ocupa este puesto, no es por servir a la patria, sino para mantener los fueros senatoriales que impiden que pueda ser juzgado por la justicia ordinaria en caso de que sea denunciado por actos de corrupción, cosa que prometió hacer Kirchner. El nuevo presidente En definitiva, haga lo que haga, el hombre que rompió todos los códigos éticos, que convirtió su gobierno en una corte poblada de bufones y mangantes del dineros público, el hombre que se enriqueció e hizo enriquecer a sus secuaces, ya es historia para los argentinos. Kirchner, flamante presidente electo, comenzó la jornada con trabajo. Deliberó con Roberto Lavagna, el ministro de Economía de Duhalde y que seguirá en su puesto. Al salir de su domicilio céntrico le ratificó a la prensa que su próximo gabinete lo anunciará el próximo lunes 19, cuando regrese de Santa Cruz, donde viajó ayer para encontrarse con sus hijos y renunciar a su cargo de gobernador. Kirchner aseguró que no entrará «en la Casa Rosada para irse en un helicóptero como se fue De la Rúa, sino para quedarme cuatro años, como corresponde». Por supuesto hizo referencia a la renuncia de Menem y dijo que esa actitud había dejado un sabor amargo a todos los argentinos. Kirchner también agradeció el apoyo recibido por el ex presidente Eduardo Duhalde. Mientras tanto, las fuerzas políticas que quedan en la oposición realizaban rápidos reacomodamientos para definir en qué postura se ubicarán cuando el próximo 25 de mayo asuma Kirchner la jefatura del Poder Ejecutivo Nacional.