Tres muertos tras un ataque terrorista en Chechenia
La explosión de una mina al paso de un autobús de pasajeros causó ayer viernes en Grozni, la capital de Chechenia, tres muertos y una decena de heridos. El atentado perpetrado ayer en la capital chechena coincide con la cumbre entre Rusia y la UE y con un recrudecimiento del acoso a la población civil por parte de las tropas rusas. La organización Human Rights Watch (HRW) ha pedido a los mandatarios de la UE, que hoy sábado serán recibidos por Putin, que pongan sobre la mesa la cuestión de la violación permanente de los derechos humanos en Chechenia. HRW sostiene que cada día desaparecen en la república una media de dos personas que, por lo general, suelen ser encontrados al cabo de meses en alguna fosa común. La explosión que ayer sacudió el barrio de Oktiábrski de Grozni se debió a una mina oculta junto a la calzada que fue accionada por control a distancia. Según el alcalde de la ciudad, Oleg Zhidkov, el atentado parece que estaba dirigido contra el jefe de la comisaría local de policía, pero su vehículo fue adelantado en el momento de la deflagración por un autobús de línea que recibió de lleno la onda expansiva y la metralla resultantes de la explosión. Los muertos y la mayor parte de los heridos eran transeúntes que pasaban por el lugar y algunos de los ocupantes de varios camiones en los que viajaban trabajadores de la construcción.